Este jueves alcaldes de diversas comunas de la región arribaron a Concepción en busca de un encuentro con el el Intendente Victor Lobos, quien no les había dado audiencia cuando se la solicitaron. A la prensa declararon que la sequía que sufren las poblaciones que representan ya es insostenible para el presupuesto de sus municipios, por lo que requieren de mayores recursos y planes para superar esta situación.
No obstante, el discurso de los ediles y el de los medios de comunicación que reprodujeron este hecho, adolescieron de una omisión gravosa para la credibilidad de sus intenciones de velar por el bienestar común y de informar. La omisión fue de los factores que provocan la sequía que se expande por diversas localidades, que según los alcaldes suman 392.
El consumo de agua que tienen las plantaciones forestales de pinos y eucaliptos y la dificultad en que deja al suelo para poder absorber agua, constituye el factor más determinante en la sequía de las zonas afectadas. De hecho, todas las comunas están emplazadas en medio de grandes extensiones de plantaciones forestales y sus habitantes han visto como el aprovisionamiento hídrico ha disminuido de forma inversamente proporcional a su expasión.
Las razones que sustentan este planteamiento radican en que:
-Los monocultivos forestales agrupan unos 1.600 árboles de la misma especie por hectárea, plantados al mismo tiempo. Durante el periódo de crecimiento, los árboles necesitan de grandes cantidades de agua para sus procesos de crecimiento, que cuando llega a las hojas para la fotosíntesis, se evapora. Investigadores han afirmado que un eucalipto de tres años de edad consume 20 litros de agua diarios y uno de 20 consume 200. Si a este diagnóstico agregamos que los árboles que actualmente plantan son de rápido crecimiento y modificados genéticamente para ello, un monocultivo forestal podría asemejarse a un terreno lleno de bombas extrayendo agua.
-El suelo sufre daños por diversos factores, entre ellos:
a.-la aplicación de pesticidas, herbicidas y fungicidas que impiden el desarrollo de especies distintas a los árboles de la plantación. De este modo, en una plantación sujeta a manejo la superficie no recobra materia orgánica.
b.-la compactación del suelo, provocada por el paso de vehículos o por la inexistencia de materia orgánica, hace muy difícil la retención de agua para proveer las napas subterráneas y posteriormente los cursos de agua.
c.-la erosión generada después de las talas rasa, cuando el suelo queda abosolutamente descubierto y expuesto al paso de la lluvia y el viento. Esto hace que, en una pendiente (presentes en todo nuestro territorio) se pierdan grandes cantidades de suelo, cayendo a la cuenca hidrográfica. Al perder suelo, también pierden la capacidad de retener y absorber agua.
Omitiendo estos elementos, las autoridades y los medios de comunicación, abordan la grave situación de la población sin ninguna perspectiva que ofrezca una solución. Y la razón es que su búsqueda implica conflictuar con el gran empresariado forestal.
Foto de Archivo: Campesinos de Santa Juana, amenazados por la expasión del monocultivo forestal.
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