Vecinos y vecinas del sector Los Laureles, Longaví, región del Maule, comenzaron un movimiento en defensa de bosques nativos y terrenos que serán rematados de forma fraudulenta, según acusan.Por Christopher Cortez“Fue a principios de 2020. Llegó la notificación de que Bienes Nacionales quería hacer un nuevo programa de remates y apareció el sector de las parcelas, dentro de las cuales hay dos habitadas por familias “históricas” del lugar, el terreno de la junta de vecinos y otros lotes”, relata en conversación con RESUMEN Dagoberto Fuentes, integrante del “Movimiento Los Laureles”.Su preocupación se basa en que la entidad pretende rematar públicamente 113 hectáreas de bosque nativo, por lo que cuentan con el apoyo de las agrupaciones medioambientales CEC Longaví y CODEFF Maule, según expresan en un comunicado. Además, añaden que, dentro de los lotes, se encuentra “la Junta de Vecinos, la multicancha y las áreas de esparcimiento, las cuales han sido el lugar de encuentro de la comunidad desde hace más de 50 años. Sumado a esta situación, existen familias habitando los territorios en situación de extrema vulnerabilidad que, de efectuarse los remates, serán desalojadas”, ante lo que Fuentes agrega que estas personas no tienen la posibilidad de defenderse ni tampoco de adaptarse a un cambio como aquel.Te puede interesar| "Irrespirable olor y estamos plagados en moscas": continúa la desesperación de comunidad en torno a chanchera Coexca en San Javier“Hay que decir que nosotros buscamos la instancia política por medio de la Junta de Vecinos. Enviamos una carta al Ministerio de Bienes Nacionales en la cual exigimos que, por último, se venda el terreno de la sede por un precio más módico, teniendo en cuenta que ocupamos ese terreno como organización política y territorial. El ministro desechó la opción y, finalmente, abrió la alternativa que lo comprara el mejor postor. Ahí, terminamos con toda la burocracia y, en plena pandemia, entre junio y julio, comenzamos a constituirnos como movimiento”, relata el mismo Fuentes.Otra arista, y la que los llevó finalmente a interponer un Recurso de Protección en defensa del territorio de Longaví el pasado 3 de enero, es que a las tierras se les cambió el rol respecto al uso de suelo. Estos aparecían como terrenos agrícolas, cuando allí hay bosques, flora y fauna protegida, por lo que el daño ecológico sería irreversible hacia una zona única en la región del Maule. Además, ya cuentan con plantaciones forestales que, según ellos, no han aportado a la comunidad, sino más bien han perjudicado sus suelos y la distribución hídrica.El movimiento, que unido a miembros de la Junta de Vecinos del sector agrupa a alrededor de 50 personas, elaboró también un informe socioambiental y otro de corte técnico como respaldo. A estos, se suma un documento de conformación histórica del espacio comunitario Los Laureles, con el que buscan rescatar la memoria de sus habitantes y cada espacio que hoy se encuentra en entredicho.“Queremos que Bienes Nacionales baje el remate porque le está afectando a la propia comunidad y, lo otro, es que también se revisen nuevamente las bases y se cambie el rol que actualmente poseen los suelos de Los Laureles, de agrícola a patrimonial y turístico, que es lo que se adapta a las necesidades de la comunidad y el entorno”, aseguran desde la asociación de vecinos y vecinas defensores de las parcelas.Puedes revisar su campaña medioambiental haciendo clic acá.
