[resumen.cl] El hombre de los acuerdos paulatinamente deja entrever su verdadero rostro. Burgos cuenta ahora con un simpatizante de sus prácticas conspirativas y represivas, un sujeto que arrastra como prontuario los casos de escuchas telefónicas a parlamentarios y miembros de Carabineros, el caso de la persecución contra Mohammed Saif Khan, el supuesto “terrorista” pakistaní, y el “terrorista” caso bombas en que todos los acusados resultaron absueltos. La Presidenta Michelle Bachelet, confirmó este martes el nombramiento del próximo Director General de Carabineros: Bruno Villalobos Krumm.
El primer caso significativo donde aparece este sujeto fue denunciado por miembros de la propia institución policial quienes denunciaron ser víctimas de pinchazos telefónicos de se la Dipolcar y cuando el nuevo designado dio sus explicaciones a la Comisión de Derechos humanos de la Cámara de Diputados del escándalo -debido a que las escuchas ilegales ocurrieron cuando el era Director de inteligencia- dejó en evidencia la clase de sujeto que acaba de ascender al lado de Burgos. Como rescató Radio Villa Francia el presidente de dicha comisión, el Diputado Sergio Ojeda, manifestó que “Nunca desde el retorno a la democracia un miembro de las Fuerzas Armadas, menos un general de la República, se había atrevido a tratar de una manera tan grosera e insolente a una comisión de la Cámara de Diputados, ni menos a cuestionar su forma de actuar”. Villalobos fue un férreo defensor del “secreto” que se debía tener sobre estos procedimientos de escuchas ilegales.
El caso del supuesto terrorista pakistaní Mohammed Saif Khan fue una verdadera persecución con la sola motivación de aumentar “percepción” de inseguridad de la población se vio afectada a través de un “terrorismo” mediático. Villalobos se abría un espacio en los aparatos de inteligencia, lo que sirvió para que fuera ascendido como director de Inteligencia Nacional, Drogas e Investigación Criminal de Carabineros, oficina que se creó luego del “Bombazo” en la estación de Metro Escuela Militar.
Para que hablar del caso de los 14 jóvenes detenidos por el bullado caso Bombas del ex fiscal Peña, fiasco de gran envergadura donde Villalobos era director de Inteligencia durante el periodo en que se realizó la investigación. Los 14 detenidos fueron absueltos de las alucinaciones de Peña, el Ministerio del Interior y la “inteligencia” de las policías.
Burgos está armando el naipe, para eso cuenta con las cartas suficientes. Su labor es los acuerdos políticos “por arriba” y una férrea represión por abajo. Recursos para eso hay de sobra. Ejemplo de ello son los recursos de la ANI que según la DIPRES tiene un presupuesto de 5 mil 483 millones de pesos, de los cuales 509 millones son en gasto reservado (cerca del 10%).
La fría mano de la represión concertacionista que con ropajes de inteligencia policial disfrazan los sucios métodos sacados de “la Oficina” -también de la CNI y la DINA- se despliega a sus anchas en el Ministerio del interior. Recordemos que la aparición del infame Burgos fue de partida vapuleando cualquier cambio posible, instaurando la “gradualidad” y defendiendo la espuria Constitución de Pinochet. Eso en el mundo de las ideas, su materialización la constituyeron las amenazas y hostigamientos de personal civil y durante la última movilización golpizas a dirigentes de la FEUFRO, el disparo de una lacrimógena en un ojo a un estudiante de la USACH, sumado a las más de 20 personas heridas durante la manifestación del 21 de mayo, donde quedaron heridos de gravedad 2 estudiantes, uno de ellos Rodrigo Áviles. En Concepción una trabajadora vinculada a trabajos sindicales fue secuestrada por sujetos que le preguntaron acerca de sus actividades en los sindicatos, sus compañeros y su vida personal. En Concepción también se le recuerda porque FFEE mantuvo sitiado el barrio Collao durante la Copa América lo que impidió hasta la manifestación más pacífica que pudo haber en medio del conflicto de los profesores con el gobierno. Carabineros de civil cuenta con interminables horas de grabación sobre cualquier concentración que tuvieron los docentes en el centro de Concepción durante el paro contra la Carrera Docente.
A las pésimas huellas que deja este nefasto personaje se suma la responsabilidad política que le cabe por el reciente asesinato de Nelson Quichillao en Diego de Almagro a manos de efectivos de FFEE.
Este oscuro personaje es enemigo de la democracia, reticente a los cambios y muestra del mefítico hedor del sistema político chileno. El ministro no tuvo empacho en señalar la semana pasada que el gobierno apoyará la ampliación de atribuciones de las policías para la detención de personas, la temida detención por sospecha. Recordemos que el art 82 ya permite a las policías hacer control de identidad cuando existan fundamentos o indicios que se ha cometido o intentado cometer un delito o cuando una persona oculta su rostro y si la persona no lo hace, puede ser conducida a la unidad policial más cercana para que se identifique. ¿Que busca Burgos y el gobierno con la ampliación del atribuciones? Parece no haber otra respuesta que el Estado policial, busca la detención por sospecha.
Los prometidos cambios entonces, no vendrán. Solo vendrá la vieja y conocida maquinaria de represión sobre los que no acepten los pactos de los de arriba.
Como mencionamos en un artículo anterior el Ministro del Interior es parte de los más tradicional de la antigua Concertación. Burgos fue parte del mentado grupo München, círculo de políticos de la DC, el PPD y el PS que se juntaban a comer en el Restaurant München desde 1993. El dato no es menor pues en el mencionado restaurant también se juntaban personeros de importancia como el PS Marcelo Schilling y el actual director de la Agencia Nacional de Inteligencia (ANI), Gustavo Villalobos, quien ha ocupado el cargo en el Gobierno de Lagos y en los 2 de Bachelet. Schilling fue Director del Consejo Coordinador de Seguridad Pública más conocido como “La Oficina”, el organismo creado para desarticular y aniquilar a los partidos de izquierda que se negaron a aceptar el negociado entre la Concertación y la Dictadura pinochetista. Burgos también fue director de la Oficina, institución que utilizó la guerra sucia contra quienes se oponían a la transición pactada, utilizando informantes, tortura, infiltración de organizaciones revolucionarias, sobornos a ex presos políticos y sus familias, entre otras oscuras prácticas. El organismo es antecesor de la actual ANI que justamente dirige Villalobos, integrante del grupo München. A las reuniones también asistían Edmundo Pérez Yoma (DC), Osvaldo Puccio (PS), Carlos Figueroa (DC), José Miguel Insulza (PS), Mariano Fernández (DC), entre otros.
Fuente imagen: http://radio.uchile.cl