Casa Grulla en Cañete: creando cultura comunitaria y autónoma

[resumen.cl] La comuna de Cañete, ubicada en la provincia de Arauco, ha sido un punto de conflicto durante varios siglos. Conocida históricamente como territorio de fronteras y considerada dentro de las ciudades más antiguas de Chile, sus alrededores albergan en sus entrañas numerosos hitos de asentamientos, batallas, desplazamientos y numerosas injusticias que trajo consigo la colonia. Tierra en la que también se dio muerte al conquistador del imperio español Pedro de Valdivia, en la decisiva Batalla de Tucapel, la cual demostró a los mapuche que los invasores no eran invencibles. Así, no resulta extraño que de esta tierra broten expresiones culturales conscientes de su territorialidad, donde se sabe que la indiferencia artística y la apatía histórica son un lujo que solo pueden darse en las capitales. Casa Grulla es de estos espacios. Con un año y medio de vida autofinanciando sus talleres –de variados intereses, desde danza a fertilizantes orgánicos- mediante inscripciones y variadas actividades gratuitas, han logrado consolidarse como un importante espacio de gestión y difusión cultural. Recientemente, en el contexto de un ciclo de actividades que buscaba informar a la población sobre las nefastas consecuencias del TPP11, Resumen.cl conversó con el equipo, de lo cual les compartimos la siguiente entrevista. ¿Cómo nace casa grulla? ¿Cuáles son sus objetivos? El proyecto Casa Grulla nace como un espacio comunitario y autogestionado en la localidad de Cañete. Su principal objetivo es impartir diversos talleres enfocados al desarrollo social y cultural, integrando a las y los vecinos de la comuna a todas las actividades que se desarrollen en este espacio transformador. Este trabajo colaborativo, busca que cada persona sea el o la gestora de su propio desarrollo cultural y el de su comunidad, vinculándose siempre con el territorio. Casa Grulla se integra a la comunidad como un espacio de encuentro donde niñas, niños, adolescentes y adultos puedan desarrollar diversas habilidades en torno al arte, cultura, medio ambiente, reciclaje, pensamiento crítico y divergente. Este proyecto comunitario busca poder crear un mundo alternativo al que nos impone este sistema, transformando nuestra realidad y construyendo de manera colectiva un lugar alegre, solidario y transformador. ¿Cómo surge la inquietud y que se busca al generar una actividad en torno al TPP11? La idea de generar una actividad en torno al TPP11 surge de diversas conversaciones del grupo y de una necesidad de informar a la comunidad sobre este tratado, siendo conscientes que muchas veces en los pueblos pequeños como Cañete no siempre existen espacios de información y reflexión. Cómo habitantes de éste territorio creemos que el tratado TPP11 llegará a perjudicar profundamente el diario de vivir de todos y todas. Somos conscientes que habitamos un territorio que está en conflicto y discutir sobre este y otros temas nos hace fuertes, conscientes y agentes trasformadores de un lugar histórico en resistencia y que debe protegerse. ¿Cómo afectaría el TPP11 a una zona como su comuna y la provincia de Arauco? La provincia de Arauco es una provincia muy rica en cultura, agua y recursos naturales, este espacio y en especial la comuna de Cañete se ha convertido para nosotros en un espacio muy querido. Vemos con decepción como el TPP11 viene a consolidar un modelo de desarrollo que favorece a grandes empresarios y perjudica a la gente sencilla, trabajadora, a la tierra, el mar y el agua. Acá en Cañete la autonomía agroalimentaria es una realidad para muchas personas, el intercambio de semillas, de plantas, la recolección de productos del bosque, del mar es una realidad cotidiana para mucha gente, y quienes no lo practican pueden acceder a productos libres de agrotóxicos y orgánicos a bajo costo. El tratado TPP11 viene a dañar este aspecto tan sensible como es la alimentación de niñas y niños, jóvenes y adultos y adultas mayores. Sentimos el llamado a defender las semillas y la práctica ancestral del Travkintu (intercambio de semillas) que se ve amenazada por la puesta en marcha de este tratado internacional. La provincia de Arauco y la comuna de Cañete están siendo empobrecidas permanentemente en sus recursos naturales, nuestra gente es explotada por la industria forestal, creemos que este modelo debe evolucionar a alguno que ponga a las personas como su prioridad y la sustentabilidad de la naturaleza como el único camino hacia un buen vivir. Este tratado internacional anula esa posibilidad, puesto que estanca el modelo económico e inhibe la posibilidad de transformar este modelo extractivista, que solo busca saquear más intensamente el agua, minerales, los bosques, entre otros. Hoy en día cada vez más, la libre circulación de libros, música, entre otros permite que las personas podamos cultivarnos de manera autónoma y gratuita, para aumentar nuestro capital cultural y nuestro desarrollo inmaterial. Nos impacta negativamente la posibilidad que para acceder a lo que hoy circula libre en la web, tendríamos que pagar por ello y para eso tengamos que entrar a ser parte de los usuarios de tarjetas de crédito que tanto daño han hecho a los pueblos y a trabajadores y trabajadoras. Por otra parte, como casa cultural compuesta por trabajadoras y trabajadores de diversas áreas del espectro laboral asalariado y del emprendimiento autónomo, vemos como la aplicación del TPP11 nos coartaría las negociaciones tendientes a mejorar las condiciones laborales puesto que, en general, las empresas trasnacionales ven el aumento en los sueldos de trabajadores y trabajadoras o las mejoras en sus condiciones de vida, como una amenaza a sus expectativas de utilidades, lo que podría en riesgo a futuras sanciones a Chile como país, por las que terminaremos pagando todos y todas los que habitamos en este país. Como Casa Grulla, espacio cultural, nos sensibiliza, nos agita, nos remece pensar que todo esto se pueda llevar a cabo y que nosotros seamos espectadores pasivos de tales sucesos. La expresión artística es también una expresión social y desde ahí nos movilizamos y organizamos junto a otras organizaciones e impulsamos acciones en defensa de lo que creemos justo y necesario. ¿Cuál es el rol que pueden cumplir espacios como Casa Grulla a los debates de sociedad y construcción de cultura? Espacios como Casa Grulla pueden ser lugares donde las personas desarrollen conocimientos y habilidades que quizás no pueden aprender en lugares formales, como el colegio, el puesto de trabajo o la universidad. En ese sentido, al existir este tipo de espacios, y al generar en la gente el interés por la cultura y el aprendizaje de cosas nuevas, se está haciendo visible el hecho de que necesitamos espacios como éstos, donde se descubran talentos e intereses ocultos y se potencien otros que están naciendo, en un ambiente de alegría y de compañerismo. En una sociedad de mucho consumo, de exigencias por producir, de individualismo, hacen falta lugares de ruptura, donde las dinámicas sociales sean distintas, donde prevalezca la cooperación y el aprendizaje mutuo y la solidaridad. Y más allá de la difusión y el aprendizaje de la cultura y el arte, también se abren estos espacios para reflexión y pensamiento acerca de lo que está pasando en el mundo y particularmente en nuestro territorio, como por ejemplo, con las actividades sobre el TPP-11 realizadas recientemente, o con la jornada ambiental realizada hace algún tiempo. Espacios como Casa Grulla dan movimiento a la comunidad, y generan nuevas formas de relacionarnos entre nosotros siendo agentes movilizadores. Es importante que la relación con el territorio sea más profunda, trabajando junto a personas en distintos lugares de la comunidad, por ejemplo, en las poblaciones, no con una mirada paternalista ni intervencionista, sino de mantener lazos de aprendizaje mutuo entre distintas comunidades o grupos de personas con los espacios de cultura.
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