[resumen.cl] Si bien el 18 de octubre comenzó el Estallido Social, fue el 19 cuando éste se hizo nacional: aquel sábado una marcha se transformó en una revuelta total y dejó a Concepción, así como al resto del país, en un estadio de rebelión total.
Tras la intensa jornada que significó el 18 de octubre en Santiago el Gobierno entendió -errado como siempre- que era un fenómeno capitalino por el alza del pasaje, así que trasladó las Fuerzas Especiales de Concepción y Valparaíso hacia la Región Metropolitana, dejando a la capital penquista con un pequeño contingente que rápidamente se vio superado.
Distintas organizaciones sociales convocaron a reunirse a las 13 horas en los Tribunales de Justicia, originalmente para protestar por el Estado de Excepción decretado la noche anterior en la capital.
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Un grupo de cerca de 50 personas en la Plaza Tribunales gritando consignas mientras otras cientos miraban expectantes desde las veredas de Castellón y el paseo peatonal esperando saber qué ocurriría. Apenas comenzó la marcha por calle O’Higgins hacia Prat, miles de personas se fueron sumando espontáneamente poco a poco hasta ser varias cuadras. Al llegar a la Intendencia del Biobío, comenzó la represión con los primeros gases lacrimógenos del Estallido en Concepción en las inmediaciones de la Plaza España, escena que se repetiría durante meses de aquí en más.
El grupo era tan grande que se dividió, una parte fue a Avenida Los Carrera frente a la sede de la Policía de Investigaciones (PDI) y otro caminó hacia la Plaza Independencia.
Los intentos de represión fueron resistidos y repelidos con una fuerza nunca vista. El contingente no era capaz de contener la frustración ante las injusticias que se manifestaban en la calle y ya a las 16 horas Concepción ardía, tal y como ocurría en todo Chile. La jornada finalizó con cacerolazos en todas las poblaciones al caer la noche, las que también se tradujeron en barricadas que se multiplicaron por todo el país. Ésta sería la primera jornada de un largo proceso de días de inagotables manifestaciones que recién estaban comenzando.