La presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, quien fue detenida y torturada durante la dictadura militar brasileña, recibió el informe final de la Comisión de la Verdad, que señala a 377 responsables --196 continúan vivos-- por los delitos de lesa humanidad cometidos entre 1964 y 1988. Según la comisión, 434 personas fueron asesinadas y otras tantas desaparecidas. Dilma habló del "derecho a la verdad" y señaló que "no debe ser motivo para odios o ajustes de cuentas". El informe recomienda derogar la Ley de Aminstía de 1979.
"Este informe contribuirá a que los fantasmas de un pasado muy doloroso y triste no se protejan en la sombra de la omisión", sostuvo la jefa de Estado en el palacio de gobierno.
La Comisión, integrada por Rosa Cardoso, exdefensora de Dilma ante los tribunales militares de la dictadura, incluyó en su informe final la "recomendación" de juzgar a los culpables de delitos de lesa humanidad.
La sugerencia fue incluida en el capítulo de conclusiones del vasto informe de 4.500 páginas, que reabre una polémica sobre la Ley de Amnistía, dictada en 1979 por el propio régimen militar. La norma aún vigente, tras doce años del Partido de los Trabajadores en el gobierno, impide juzgar a los represores y responsables de torturas, desapariciones y otros crímenes.
En ese sentido, Cardoso sostuvo que "las leyes internacionales que Brasil ha firmado dicen que tienen que ser castigados". Por su parte, Jose Carlos Dias, otro de los seis miembros de la comisión, indicó que "una amnistía no puede convertirse en instrumento de impunidad" y agregó que "la dictadura juzgó, condenó, torturó y mató a aquellos acusados de practicar crímenes políticos, pero los crímenes de sus agentes no fueron comunes, sino delitos de lesa humanidad".
Fuente: http://www.pagina12.com.ar/diario/ultimas/20-261663-2014-12-10.html