Por Eduardo Hernández
Poco más de seis kilos ha bajado el vicepresidente de la Fenats del Hospital Regional de Concepción, Adolfo Bécar, quien hoy cumplió quince días en huelga de hambre, en protesta por el despido de 11 funcionarios que estaban a contrata, hasta por 10 años, y por los descuentos realizados a los funcionarios que participaron en el paro nacional por el reajuste de sector público.
El dirigente acusa una política de castigo económico de parte del director del hospital Sergio Opazo, quien además de ordenar los despidos y descuentos generales, realizó descuentos a 50 funcionarios de unidades críticas que se sumaron al paro nacional.
Hasta ahora a la huelga se han sumado dos funcionarias, Blanca Roldan, auxiliar de citopatología y Soledad Figueroa, funcionaria de cirugía, ambas hoy cumplieron una semana en huelga, en respaldo a esta acción que busca el reintegro de los trabajadores despedidos y se restituyan los descuentos.
¿Adolfo, cuándo y por qué tomaste la medida de ir a huelga de hambre?
La medida de la huelga de hambre fue tomada el día lunes 5 de diciembre, en un consejo de delegados del hospital, en función de que se estaban aplicando medidas drásticas en contra de los trabajadores de nuestro hospital. Una de ellas era que a fines de noviembre se había notificado a 11 trabajadores su término de contrato, sus despidos, a trabajadores con más de 5, 6 hasta cerca de 10 años de trabajo, sin ninguna causal administrativa.
La segunda, es que durante el mes de noviembre, producto de las movilizaciones del reajuste en que participaron 15 organizaciones y miles de trabajadores en todo el país, a este hospital se le descontó a las unidades críticas, tales como la UCI, algunos servicios de partos, como en ningún lugar del país, las horas en que los trabajadores participaron en las movilizaciones, siendo un foco para la autoridad el castigar al Hospital Regional con descuentos.
Tenemos compañeros que sufrieron descuentos de más de 200 mil pesos y la amenaza de nuevos descuentos en el mes de diciembre, que sabemos ya están realizados desde los sueldos, el día de mañana pagan, y hay funcionarios que van a tener descuentos de sobre los 200 mil pesos. Se trata de trabajadores que tienen un alto nivel de endeudamiento y posiblemente casi no tengan sueldo.
Esta medida es una medida de resistencia pasiva, porque ya teníamos la experiencia el año 2015 en que fuimos desalojados 8 veces por fuerzas especiales, por lo que decidimos hacer esta huelga en la capilla, con el apoyo del arzobispado.
A 15 días de huelga ¿Cuál es el llamado que les haces a las autoridades?
El llamado que hago a las autoridades locales, es a reflexionar respecto a lo que le están haciendo a los trabajadores para esta Navidad, que fiesta va a pasar una familia que una jefa de hogar que ganaba 400 mil pesos y le descuentan 200 mil, otras que producto de las deudas comprometidas van a sacar cero.
¿Los ha visitado alguna autoridad?
Hasta ahora, la única autoridad que nos ha visitado y dado su apoyo ha sido el senador Alejandro Navarro, nosotros hemos dicho, aquí la responsabilidad de todo lo que pasa en la salud de Concepción es el diputado José Miguel Ortiz, él es el jefe de las autoridades que tenemos en salud, todos demócrata cristianos, desde el director de servicio, seremi y directores de hospitales. Hay una red DC que tiene tomada la salud regional.
¿Ha habido alguna respuesta de parte de ellos?
Hasta ahora solo ha habido negativas a la negociación, eso sí hemos logrado avanzar mediante esta medida, rescatando a 8 compañeros qué estaban despedidos, pero aún insisten en despedir a otros compañeros que han presentado licencias por patologías como cáncer y además se insiste con los descuentos por el paro.
¿Qué harás de no haber respuesta de parte de las autoridades?
Hoy vemos que nuestras autoridades, tanto el director del hospital Sergio Opazo, como el director del servicio de salud Marcelo Yévenes, no quieren abrir una puerta de negociación, y negociar es nuestro rol como dirigentes. En lo particular, ante los 15 días sin respuesta, he tomado la decisión de radicalizar la protesta y entrar en una huelga de hambre seca o coserme la boca. Porque no se puede estar tranquilo, en especial, cuando vemos que compañeros que participaron en el paro son despedidos o se te descuentan 18 días de sueldo, dejando en una durísima situación económica a nuestros compañeros y compañeras.
¿Pero, intentarás dialogar antes de radicalizar la medida?
Hoy que es una fecha tan sensible para los cristianos, no vemos que esos valores, que dice tener el director del servicio, demócrata cristiano, se practiquen. Va a ser la medida de la fuerza de los trabajadores la que logre resultados.
Mañana hay una asamblea multitudinaria de trabajadores de la salud en este hospital de nuestra región, por lo que mandarle el mensaje a todos mis compañeros trabajadores públicos, que esta huelga no termina hasta que retrocedan, porque aquí la culpa es del Estado que no nos permite tener una negociación en qué se respete los derechos laborales, no podemos tener sindicato, por lo que este tipo de medidas son la única puerta para que haya un pronunciamiento.
¿Hay alguna reunión programada con las autoridades para dialogar?
Estamos a la espera, el director del servicio de salud, se ha negado a recibirnos, sin embargo un grupo de dirigentes regionales y nacionales no se moverán del Servicio en todo el día hasta que haya una respuesta. Yo espero que Marcelo Yévenes (director del servicio de salud) busque llegar a una salida para destrabar este movimiento.
¿Cuándo se reúnen como Fenats?
Mañana hay una asamblea y como siempre ha sido, aquí la decisión va ser una decisión colectiva, pero tenemos la certeza, tenemos la claridad, de que de no haber solución tendremos que tomar medidas extremas, como la huelga seca o conocerme los labios si es necesario. De esta forma vamos a notificar a la autoridad, que cuando ellos están disfrutando de la Navidad, los trabajadores del hospital Guillermo Grant Benavente, producto de sus descuentos y despido, la estarán pasaran mal y quizás no tendrán para cenar.