Falsa señal del gobierno alemán en su política de integración

Los turcos de Alemania quieren demostrar que ni los alemanes saben tonto de Alemania.

 por Mario Morasan (con este articulo inauguramos la colaboración de Mario Morasan a nuestra sección "Mundo")

 Frácfort(Alemania)- Para ser alemán hay que empezar a estudiar. En septiembre comenzarán a realizarse los exámenes de naturalización aprobados por el Gobierno alemán, que han desatado la polémica. Todos los extranjeros mayores de 16 años que quieran obtener la nacionalidad alemana deberán pagar 25 euros para hacer el examen, de tipo test, y acertar al menos 17 de las 33 preguntas que lo conformarán.

¿Cuál es la función de la oposición en el Parlamento? ¿En qué año se fundó la República Federal de Alemania? ¿Qué pretendía Willy Brandt cuando en 1970 se arrodilló al visitar lo que fue el gueto de Varsovia? Son algunos de los ejemplos de preguntas que ha difundido el Gobierno. Las críticas no han tardado en llegar.

Partidos políticos, asociaciones de inmigrantes y medios de comunicación coinciden en que el nivel es muy elevado y censuran la medida.

 Alarde de memoria

"Estas preguntas demuestran que el Gobierno alemán no tiene ningún interés en ofrecer un proceso de nacionalización sencillo que garantice la igualdad de los inmigrantes y refuerce su vínculo con este país", asegura el portavoz de la Asociación Turca de Berlín y Brandenburgo, Safter Çinar. Para ellos el examen no tiene ningún sentido: "No entendemos qué pretenden exactamente. ¿Que la gente se lo aprenda todo de memoria para olvidarlo al día siguiente? ¿Ese es el requisito para ser alemán?", sentencia Çinar. Pero los problemas que conlleva el examen no son solo una cuestión de opinión, sino también de logística.

El Gobierno ha asegurado que todo el mundo tendrá acceso al catálogo de 310 preguntas, del que se extraerán aleatoriamente 33 para cada test. El problema es que, hasta el momento, solo se han publicado siete de esas 310 preguntas y no se sabe cuándo estará listo el catálogo definitivo. La complejidad de algunas preguntas hace que sea necesario organizar cursos para los inmigrantes que deseen examinarse, pero a estas alturas parece que no habrá tiempo para los primeros aspirantes.

 Esperando el cuestionario

"El problema es que hace falta formar al profesorado que imparta los cursos y no lo podemos hacer mientras el catálogo de preguntas no esté listo. Ahora viene la pausa de verano. No hay tiempo", afirman fuentes de la central de escuelas para adultos alemanas.

Un instituto especializado de la Universidad Humboldt de Berlín se encarga actualmente de preparar el polémico cuestionario y asegura que estará listo en pocas semanas. Las preguntas se encuadrarán en tres campos distintos: Política en la democracia, Historia y responsabilidad y Gente y sociedad. Para los conservadores alemanes, que impulsaron la medida, los conocimientos en estas tres áreas acercan al inmigrante a la cultura de Alemania y el examen servirá de muestra de su interés por el país al que quieren pertenecer.

Pero la mayoría de los medios de comunicación coinciden en que muchos alemanes no serían capaces de superar un test así, por lo que no es justa tanta exigencia. El semanario Spiegel llegaba a afirmar en su edición on line: "Esto demuestra que nuestros políticos no hacen políticas de inmigración para los inmigrantes, sino para sus votantes alemanes".

Solo algunos medios se muestran más benévolos, entre ellos el Bild Zeitung, el diario más leído de Alemania. Su edición de fin de semana, el Bild am Sonntag, publicaba una encuesta propia según la cual dos tercios de los ciudadanos alemanes están a favor de la introducción del examen. Para el sondeo se había preguntado a 503 alemanes "representativos" y escogidos intencionadamente, según aclaraba elpropio periódico.

A la espera de la publicación del catálogo definitivo de preguntas, asociaciones y partidos de la oposición ya han advertido de que presentarán un recurso si se mantiene el nivel de las pocas preguntas modelo que se han dado a conocer hasta ahora.

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