[resumen.cl] El máximo tribunal del país ordenó a FONASA y al Hospital Las Higueras de Talcahuano a gestionar, financiar y administrar medicamento Eculizumab a niña afectada por síndrome hemolítico urémico atípico, que le fue diagnosticado el 28 de junio del año pasado.
El fallo desestimó la defensa de las instituciones públicas que se sostenía en la falta de recursos económicos, dado el alto costo del medicamento lo que obligaría a priorizar otras patologías.
La sentencia de la tercera sala de la Suprema califica la decisión de no otorgar el medicamento como algo ilegal y además vulneratorio de una serie de tratados que el Estado de Chile debe respetar. Aduce que:
“Esta conducta omisiva de no proporcionar el medicamento por a lo menos los dos años que se le ha prescrito, pone en riesgo su existencia, constituyendo un acto ilegal en tanto se incumple deberes impuestos por la Convención Internacional de Derechos del Niño, por el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos, y por la Convención Americana sobre Derechos Humanos, y atenta contra el derecho a la vida e integridad física y psíquica de la menor Javiera Mansilla Alarcón, consagrado en el artículo 19 Nº 1 de la Constitución Política de la República, y amparado por el artículo 20 del mismo cuerpo legal, desde que se está en presencia de un uso medicinal urgente, pudiendo las instituciones de salud recurridas adquirirlo con cargo al Fondo Extraordinario de Salud".
Además, la Suprema señala que la decisión también es arbitraria, “pues priva en la práctica el acceso a la menor al medicamento, infiriendo con su actuación un daño significativo que afecta el derecho a su vida"Por la demora en la entrega del tratamiento la niña ha arriesgado quedar con insuficiencia renal crónica terminal y evolucionar con otras complicaciones sistemáticas graves.Vea el Fallo