Durante un mes muchos medios no han cesado de presentar la violencia en Venezuela como el choque entre manifestantes que protestan contra el gobierno exigiendo democracia y unas fuerzas del orden que respondían con represión. Los muertos ya son 26, algunos de ellos por acciones policiales. Tras la manifestación del pasado 12 de febrero, el diario Últimas Noticias y las redes sociales divulgaron fotos y vídeos de funcionarios del Sebin (Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional, el cuerpo policial venezolano de inteligencia y contrainteligencia) disparando.
El presidente Maduro informó en rueda de prensa que cesó al director de ese departamento y que esos agentes están detenidos y bajo investigación por los hechos ocurridos ese día, debido a que desobedecieron las órdenes del director del Sebin de estricto acuartelamiento. La fiscal general de la República, Luisa Ortega Díaz, junto con la Defensora del Pueblo, Gabriela Ramírez, dieron explicaciones en el XXV Consejo de Derechos Humanos de la Organización de Naciones Unidas (ONU) en Ginebra.
Sin embargo, es necesario conocer la violencia procedente de los grupos manifestantes, sólo de esta forma se podrá desmontar el argumento de que se trata de estudiantes o ciudadanos que, espontáneamente, protestan contra el gobierno de Nicolás Maduro. Mientras instituciones como el Parlamento español o acontecimientos como la gala de los Oscar piden democracia y paz al gobierno venezolano, algunas de las siguientes fotografías y vídeos resultan elocuentes para deducir que sus opositores no son meros manifestantes pacíficos. No es difícil deducir qué les pasaría en España a los protagonistas de esta violencia cuando en nuestro país se han impuesto multas en 2012 y 2013 por valor de 587.000 euros a personas que participaron en manifestaciones.