La fragmentación del hábitat es una amenaza mayor para la Guiña que la persecusión por humanos

[resumen.cl] Un estudio reporta que la fragmentación y degradación del  hábitat, producto de las subdivisiones en el terreno hacia porciones más pequeñas, son la mayor amenaza que enfrenta el felino Guiña en Chile. La fragmentación y la degradación del hábitat son amenazas clave para la persistencia a largo plazo de los carnívoros, los cuales son también suceptibles a la persecusión directa por las personas.     [caption id="attachment_50069" align="aligncenter" width="760"] Leopardus guigna (Molina, 1782)[/caption]   La Guiña (Leopardus guigna) es el más pequeño de los felinos silvestres de América, con una longitud de entre 65 y 3 cm y su peso alcanza 2 a 3 kg. Es un cazador nocturno y sus presas son pequeños roedores arborícolas, pequeños marsupiales, aves, insectos y otros mamíferos. Sus depredadores naturales son el puma y el zorro colorado. La Guiña ha estado declinando en las últimas décadas, con su población estimada en menos de 10.000 individuos. Aunque la especie se encuentra protegida en Chile y Argentina, está en la lista roja de especies amenazadas por la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (IUCN, por sus siglas en inglés) desde 1996. La Guiña tiene la reputación de atacar al ganado y por esto es percibida de forma negativa por los habitantes de la zona. Como resultado, se ha asumido que la mayor amenaza para este felino es la persecusión humana, acoplada con la intensa actividad agrícola y forestal que ha reducido su habitat natural, el bosque nativo, en al menos un 70%. El estudio recientemente publicado en la revista Journal of Applied Ecology enfocó en el caso de este felino silvestre en la ecoregión de los bosques temperados en el sur de Chile. El estudio señala que la "Guiña" es sorprendentemente tolerante a la deforestación y que la caza directa que realiza la gente en represalia por la depredación del ganado no es tan común.       [caption id="attachment_50070" align="aligncenter" width="825"] Distribución de la cobertura de suelo y áreas protegidas en torno al área de estudio en las cuencas de los lagos Colico, Caburgua, Villarrica y Calafquén en la región de la Araucanía. Las dos zonas donde se aplicaron las unidades de muestreo de 4km cuadrados de área cada una, están indicadas a la izquierda (valle central) y a la derecha (valles andinos). Fuente: (Gálvez et al., 2017)[/caption]     Existe literatura que suguiere que el declive de la Guiña es generado por la pérdida de habitat, la fragmentación de este y la persecusión en respuesta a la depredación del ganado. El presente estudio estudio trabajó con modelamiento de datos, sondeos con cámaras trampa durante 4 temporadas, imagenes remotas y cuestionarios a los habitantes de la zona. El estudio aplicó metodos sociales y naturales para examinar como la configuración del hábitat, su calidad y las relaciones humano-depredador pueden interactuar en espacio y tiempo con efectos en las poblaciones de carnívoros que dominan los ambientes. El estudio apuntó que las guiñas pueden tolerar un alto grado de pérdida de habitat (>80% dentro de un rango). Se concluyó que la especie es principalmente afectada por la fragmentación y subdivisión de la tierra (grandes extensiones de habitat siendo divididas en varias más pequeñas) Por su parte, el 10% de los lugareños encuestados señaló haber matado ilegalmente a esta especie durane la última década. El estudio señala que los paisajes humanos con actividades de agricultura y ganadería intensiva también pueden tener un valor de conservación, siempre y cuando cuenten con una red de habitats parche mantenida en la zona. Los investigadores señalan que los esfuerzos de conservación para asegurar la presencia a largo plazo de los carnívoros se deberían enfocar en la reducción de la fragmentación del hábitat antes que en la persecusión por humanos. De esta forma, las áreas de intensiva actividad agrícola, serían en realidad adecuadas para la Guiña y no deben descartarse como habitats de mala calidad. Esto se debería a que estas áreas no cultivadas pueden brindar refugio, recursos alimenticios y condiciones para la crianza. Los investigadores destacaron que los agricultores de grandes propiedades son clave para la conservación de esta especie y deben estar considerados en cualquier intervención de conservación que se ponga por objetivo proteger las tierras que conforman el hábitat de la Guiña.     Fotografía principal: Leopardus guigna (Molina, 1782) Foto: Flickr eMinte
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