La huelga sin ingerir alimentos ni líquidos continua. Sin ningún acuerdo concreto finalizó la reunión que sostuvo ayer en Collipulli el ministro de Justicia y DDHH, Hernán Larraín (UDI), con la vocería de los ocho presos políticos mapuche de Angol. Lejos de destrabar la situación, el gobierno se posicionó desde la intransigencia aseguró Rodrigo Curipan, vocero de los comuneros en huelga de hambre.Por Juan Contreras Jara / resumen.cl
Rodrigo Curipan expresó que la conversación se entrampó debido básicamente "a la falta de voluntad del gobierno. Nos pidió 12 días para resolver el asunto, nos pidió discrecionalidad y cumplimos. Lamentablemente, es el gobierno quien no ha tenido la voluntad política de abordar este asunto. Nos encontramos con un ministro que se taimó políticamente, que llegó de brazos atados a sentarse a la mesa con un discurso aprendido, sin voluntad de diálogo”.
La visita de Larraín a la Araucanía se ve así como un saludo a la bandera, debido a que el gobierno sigue sin aplicar el Convenio 169 de la OIT a la situación de los comuneros, lo que se expresó en su negativa a cambiar sus medidas cautelares y en los casos que corresponde, trasladar a los condenados hasta un Centro de Estudio y Trabajo (CET). Pese a que estas variables fueron expuestas por su vocería como salidas inmediatas a la huelga, el gobierno de Sebastián Piñera dijo no.
Desde las comunidades en resistencia de Malleco denunciaron un trato discriminatorio por parte de Hernán Larraín, comentando que “se entrampan buscando resquicios legales para confundirnos, pero somos personas que sabemos cómo funciona el sistema legal. Es una estupidez y una forma de tratar siempre al mapuche como alguien que no conoce de lo que habla. Hay un ministro que viene a tratar de echarnos a todos al saco, hay una apreciación discriminatoria, no ven al mapuche bajo las mismas condiciones”.
Curipan detalló que “no se avanzó en cómo aplicar el Convenio 169 por ejemplo en los traslados al CET, evidentemente todos cumplen con las condiciones para irse y si hubiera voluntad el mismo convenio les serviría para concretarlo”, refiriéndose a la situación de los tres presos políticos de Angol actualmente condenados y en huelga seca.
Con respecto a la solicitud de cambiar la medida cautelar de los huelguistas nuevamente se refirieron al art. 10 del Convenio 169 de la OIT, relativo a buscar medidas distintas al encarcelamiento. “Puede haber ahí un entendimiento jurídico que no se contradice con el derecho, pero para llegar a eso hace falta voluntad. El gobierno ha sido querellante en todas las causas sobre los presos políticos mapuche, por lo tanto como querellante puede retirarse de la querella como también adherir a la moción de cambio de medida cautelar, entonces no pueden decir que están atados de manos”.
En relación al discurso de la igualdad ante la ley emanado desde el Estado chileno, Rodrigo Curipan recordó los casos de Carlos Alarcón sargento del Gope responsable del homicidio de Camilo Catrillanca, quien producto del contexto sanitario y por solicitud de su defensa goza de prisión preventiva. “Igualdad ante la ley nos dicen y nosotros estamos con toda nuestra gente en huelga de hambre en la mayor parte de las cárceles donde hay mapuche para pedir un derecho que debería haberse ejecutado de forma inmediata”.
Cabe recordar que hoy los ocho comuneros cumplen 116 días sin comer y cuatro sin ingerir líquidos con el afán de presionar al gobierno a que ponga en práctica el Convenio 169 de la Organización Internacional del Trabajo y regule bajo éste marco legal la situación judicial de los veintisiete comuneros que aún siguen en huelga de hambre.
Actualmente, se encuentran bajo observación en el hospital de Angol Reinaldo Penchulef y Víctor Llanquileo, debido a su delicado estado de salud. Desde su vocería adelantaron que durante esta tarde deberían ser trasladados también los comuneros Juan Calbucoy y Sergio Levinao hasta el mismo recinto médico.