¿Cuánto puede influir en nuestras vidas, la plantación desmesurada de pino radiata?

Las plantaciones de pino- y también las de eucaliptos- han modificado la matriz productiva de la región de una forma bastante significativa, haciéndola pasar de una zona agrícola rica en biodiversidad, a un monocultivo de pinos o eucaliptos, transformando al trabajador del campo, en un trabajador forestal con contrato precario o sin contrato, con salario ínfimo, pues el trabajo no requiere una mayor calificación que la básica, escasa seguridad y empleo estacionario.

 El sector forestal a largo plazo genera una pérdida neta del empleo, puesto que la silvicultura reemplaza a la agricultura intensiva y desplaza a los trabajadores rurales, provocando así ciudades e incluso zonas económicamente monodependientes. Debido a los empleos estacionales, se genera pobreza y marginación.

 Se seca la tierra, queda sin agua ni minerales y se abandona junto con el trabajador. Las ganancias sacadas del trabajo y de la tierra son repartidas entre dos grandes conglomerados, la familia Matte y la familia Angelini y para el resto solo queda el desempleo. Los sectores con más altos índices de desempleo y crecimiento de población negativos, son zonas donde la mano forestal se ha posado (ver cuadro). Bien lejos de su territorio las ganancias extraordinarias del negocio se reparten entre estos dos peces gordos: Arauco US$2.268 millones y CMPC 1269 millones solo hasta el 2007. En el 2008 CMPC gano US$129 mil millones y Arauco US$332.5 mil Millones solo el primer semestre.

 Así como se nos dice que hay bosques de pinos, cuando son en realidad plantaciones, así como se nos oculta el caos y la miseria que deja el negocio forestal, también se nos oculta la responsabilidad del negocio forestal en los incendios.

 El pino radiata es una especie introducida, originaria de América del norte (California y algunos sectores de México). En su lugar originario el pino crece hasta unos 30 mts. de altura. En Chile llega a crecer de 30 a 50 mts. debido a las condiciones climatológicas.

 Uno de los grandes defectos que tienen estos monocultivos, en particular los de radiata, es que los pinos exudan una resina en dos formas: líquida y sólida. La trementina es la parte líquida, que al igual que el sólido denominado colofonia, es altamente inflamable (con ellas se produce desde el aguarrás hasta algunos adhesivos). Su punto de inflamación se ubica en los 35º y puede llegar a ser explosiva.

 ¿Qué de peligroso podría tener cientos de hectáreas de pino radiata, que exuda una resina inflamable a los 35º en pleno verano, con viento, a tan solo unos metros de la población Raúl Silva Henríquez de San Pedro?

 Los incendios forestales más peligrosos son los denominados fuegos de copas. En ellos el fuego consume las copas de los árboles alcanzando temperaturas entre 600 y 1500 grados y avanza a una velocidad enorme, catastrófica y peligrosa, sobretodo si hay casas cerca. Se genera una especie de bola de fuego que avanza a grandes velocidades dejando a su paso una temperatura y sonido aterradores. Una verdadera tormenta de fuego, quemando desde arriba hacia abajo. Son incendios casi incontrolables.

 En Chile la obsesión desmesurada por el negocio forestal ha dejado plantaciones pino y eucaliptos a metros de hogares, mientras que en Canadá, las plantaciones deben estar al menos a 1.6 Km., para poder realizar los cortafuegos.

 Incluso en estos países donde se norma el negocio, las plantaciones van modificando su altura, porque de esta manera el fuego no se propaga con facilidad pues las copas no están a la misma elevación y por lo tanto, dificulta su extensión.

 Hay una gran cantidad de incendios forestales que son naturales, pero cuando esa naturaleza se modifica puede adquirir características perjudiciales para la población como lo son los incendios de plantaciones forestales.

 En Chile esto es un control que ni siquiera se comenta, pues se habla de incendios intencionados o naturales, pero jamás de la responsabilidad de las forestales. Ni en cuánto a los incendios, ni en cuánto al desempleo, ni en cuánto al saqueo de los recursos naturales.

 El control sobre la desmesurada extensión del territorio forestal debe ser regulado porque atenta contra la seguridad de los sectores aledaños. No se puede permitir que no haya las condiciones mínimas de seguridad en un territorio eminentemente forestal, pues se atenta solapadamente contra la vida de la población.

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