[resumen.cl] Este domingo la Junta de Vecinos de la Población Padre Hurtado 4 y 5, de Hualpén, organizó la fiesta de navidad de las niñas y niños del sector. Lo llamativo de la situación es que los vecinos debieron pedir que se cortara el tránsito en calles aledañas a su sede para instalar camas elásticas y juegos inflables, debido a que el sitio donde tradicionalmente realizaban la actividad fue dividido y una parte fue entregada por el municipio a una iglesia católica.
No fue la única situación irregular la entrega de la antigua sede de la Junta de Vecinos, por parte de la Municipalidad de Hualpén, a un centro evangélico. Al hecho se sumó que la actual sede de los vecinos de la población Padre Hurtado 4 y 5 fue dividida en dos, para entregar el terreno colindante -entre la sede y una plaza del sector- a una iglesia católica.
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Sonia Toloza, presidenta de la Junta de Vecinos señaló en el lugar la situación en la que quedaron tras la acción realizada en conjunto por una vecina del sector, con el Concejal Oclides Henríquez “Como usted puede ver tengo todo los juegos afuera porque lamentablemente no podemos ocupar el espacio que teníamos antes debido a que se lo cedieron a una comunidad católica […] Tuvimos que pedir permiso para que los niños puedan jugar acá en la calle”
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La vecina agrega “Antes teníamos el espacio donde los niños podían jugar tranquilamente y transitar sin problema alguno”. Señala que de manera alguna el espacio se encuentra abandonado o sin uso como para atribuir su utilización por parte de una comunidad religiosa a su deterioro “Acá la sede se ocupa siempre, todos los días en el transcurso del año, inclusive en la noche” fustiga Toloza.
No es el único hecho irregular en la Población en relación a la entrega de espacios a comunidades cristianas. La Junta de Vecinos ocupaba otra edificación hace unos años atrás, la que pidieron en reiteradas oportunidades en comodato para poder usarla en beneficio de toda la comunidad. Sin embargo, el espacio fue entregado en comodato por parte de la Municipalidad de Hualpén a un centro evangélico.
La dirigente vecinal afirma que viene pidiendo ese espacio desde el año 2016 ”mandé cartas solicitando en comodato de esa sede, pero no se cedió, no me lo dieron […] estábamos pensando en tener un lugar con equipamiento, una multicancha, porque eso hace falta aquí en este sector: no hay ni escuela, ni multicancha, no hay espacio donde los niños se puedan esparcir y jugar. Acá está lleno de calles, pasa locomoción […] el único espacio es el que tenemos detrás de la sede, es el único lugar de esparcimiento”.