Hoy lunes, la joven Marjori Larenas relató a radio Bio Bio que pagó mil dolares a la agencia WinUSA por un programa llamado Trabajo Seguro, donde la empresa se comprometía a encontrarle un trabajo en Estados Unidos, con el que recuperaría el dinero y ganaría mucho más.
Marjori narró que la empresa no cumplió el convenio, que estuvo tres meses en el estado de Florida sin poder trabajar y que tuvo que gastar 3 millones de pesos en la espera del prometido empleo.
La joven se encontraba viviendo con uno de los jóvenes que sufrieron el ataque racista del que resultaron dos de ellos muertos. Según su testimonio, ella abandonó ese lugar dos días antes de la balacera, emigrando al estado de Misisispi en busca de empleo. En este estado, Marjori trabajó, sin embargo no recibió ningún pago por ello.
Esta situación no es primera vez que es denunciada y a pesar que otros jóvenes han emprendido acciones legales en contra de estas “agencias del dinero fácil y entretenido”, estas siguen operando sin ningún control... como en un libre mercado.