Su nombre científico de la borraja es Borago Officinalis, esta hierba es de origen Hispano-marroquí, actualmente, la encontramos en nuestro país y es muy fácil de cultivar. Además crece en forma silvestre con gran facilidad. Es una planta de un agradable sabor y aroma, mide entre 20 y 70 cm de altura, sus hojas son vellosas y sus flores azules. La floración ocurre durante el verano.
Sus hojas nuevas poseen una buena cantidad de vitamina C. Para guardar la hierba se debe cortar la parte superior del tallo, a mano y ojalá con guantes. Tiene propiedades principalmente en sus flores. Para remedio se usan también tallos, hojas verdes, hojas secas y semillas.
La infusión de 15 a 20 gramos de hojas y flores secas en un litro de agua hirviendo es sudorífica, en casos de gripe y resfríos controla la fiebre, mezclada en partes iguales con tilo, es mucho mejor.
La misma infusión, gracias a que tiene un efecto protector (similar a las mucosas), sirve para aliviar afecciones de las vías respiratorias y bronquios, tos faringitis e irritación en la garganta causada por la tos. Tiene propiedades expectorantes, contribuye a despejar de flemas el aparato respiratorio. En resfriados se consume borraja, dos a tres hojas frescas en un jarro de leche.
La infusión actúa muy bien contra estados y trastornos nerviosos.
La borraja es diurética, es decir, estimula la eliminación de líquidos del organismo, sirve para tratar la retención de líquidos y es útil en casos de cistitis, nefritis e infecciones urinarias, y para prevenir cálculos renales. Beber infusión de borraja tiene un efecto antiinflamatorio de las vías urinarias, para esto preparar una infusión de flores.
Es estimulante del organismo y digestivo; se dejan macerar cerca de 50 gramos de flores en un litro de vino blanco por diez días, luego se cuela y bebe. Es buen depurativo, limpia el sistema digestivo y ayuda a eliminar toxinas que están en el torrente sanguíneo.
La borraja tiene propiedades que ayudan a disminuir la presión arterial, por lo que está muy recomendado su uso a las personas que habitualmente presentan casos de presión arterial alta.
Por sus propiedades antiinflamatorias, la borraja se usa de forma externa para tratar erupciones e inflamaciones en la piel: preparar cataplasmas de hojas frescas y aplicar en la zona afectada o bien la decocción de borraja, para madurar forúnculos se pasan las hojas por agua hirviendo y se aplican calientes sobre la piel, cubriéndola con una gasa.
De las semillas de esta planta se obtiene un aceite con gran contenido en ácidos grasos esenciales, que son indispensables para la vida humana y que sólo pueden ser obtenidos a través de los alimentos. De estos ácidos depende la producción de prostaglandinas, una substancia asociada al aborto, de aquí que popularmente se consuma borraja (asociada con la ruda) para terminar embarazos no deseados.
No tiene mayores contraindicaciones, salvo evitar su consumo durante embarazos.
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