Las dificultades actuales para su producción y su consumo en nuestra comunidad.
El gobierno ha anunciado que Chile está a punto de ser una potencia en cuanto a producción de miel y de hecho en nuestra región se produce el 36% de la producción de miel a nivel nacional y cuando las empresas la exportaron en el 2008, la vendieron a $1.200 el kilo. Sin embargo en las ferias y los supermercados la miel ha subido cada vez más de precio, casi desapareciendo de nuestra dieta.
La miel nos previene de un montón de enfermedades, su valor nutritivo lo aprovechan los países europeos, donde se va el 90% de la que se produce en Chile, de hecho el 2008 se exportaron 9.886 toneladas de miel. Alemania tiene un consumo per capita de casi 1 kilo de miel por habitante y para allá se va el 76% de las exportaciones chilenas.
Se da a creer que la producción de miel está a cargo de campesinos y que son ellos los que han ido ganando con la apertura de este negocio. Resumen conversó con Juan Sanhueza, apicultor de Buenuraqui, comuna de San Rosendo y nos explicó la situación actual de los campesinos apicultores y como el negocio de la miel está controlado por 6 empresas que manejan casi el 100% de la exportación.
Juan nos dice que el Estado está consciente que los pocos terrenos que están en manos de los agricultores ya no son productivos, debido a las plantaciones de pino y eucalipto secaron los cursos de agua que servían para el riego de los cultivos. En esta situación, el INDAP o el Fosis llegan al campo a repartir colmenas de abejas, materiales de apicultura y da un curso para ello. Sin embargo, la mayoría de los campesinos que han recibido las abejas, a los dos años se les han muerto todas, porque hay un montón de factores que en estos momentos están poniendo en riesgo la producción de miel en nuestro país y que el Estado no se hace responsable de ellos.
-el calentamiento global ha provocado variaciones en la temperatura de nuestro clima, las temperaturas están siendo extremas, las abejas deben mantenerse dentro del cajón a 32 ºC, si no se alcanza esta temperatura pueden morir. Las abejas para mantener esta temperatura deben hacer mayores gastos de energía, lo que se expresa en el aumento de la cantidad de alimentación que necesitan y si no lo tienen en cantidad suficiente, pueden morir.
-la expansión de las plantaciones forestales han provocado una disminución del alimento para las abejas. El eucalipto da flor, pero el pino no da, por lo que es un árbol que no produce alimento para las abejas. El bosque nativo es el lugar que ofrece las condiciones para que las abejas puedan alimentarse y producir miel para nosotros, pero en nuestra zona este ha sido arrasado por el negocio de las forestales. Hace 20 años atrás, cada cajón producía de 60 hasta 80 kilos de miel por temporada, ahora lo máximo que producen es 30 kilos en el año.
-la fumigación de las plantaciones forestales que han provocado la muerte de colmenares completos, por la toxicidad de los pesticidas. Cuando atacó la Polilla del pino, las forestales fumigaron todas sus plantaciones y con ello murieron casi todas las abejas de la región. Los campesinos demandaron a las forestales, pero todo quedó impune.
-la introducción de diversas enfermedades que hacen que el apicultor tenga que hacer distintos gastos para cuidar sus colmenas. Estas enfermedades han sido introducidas de varias formas, una muy común es cuando las grandes empresas productoras de miel llevan sus colmenas (más de 2000) a sectores cordilleranos como Santa Barbara, Ralco y Trapa Trapa, porque ahí hay vegetación nativa.
Cuando sucede esto, las comunidades que cultivan miel para su subsistencia, ven como llega una empresa con miles de cajones, dejando a sus abejas con menos comida, menos producción de miel y con enfermedades que en ocasiones produce la muerte de colmenas enteras. Para detectar estas nuevas enfermedades hay que tener ciertos conocimientos y saber que hacer al respecto. La mayoría de los campesinos no conoce estas nuevas enfermedades, por lo que en poco tiempo sus abejas mueren. Un ejemplo de esto es la Loque Americana, una enfermedad que provoca la muerte de las crías y es de difícil erradicación, en octubre de 2005 se expandió de Copiapó a las regiones del sur y hasta el momento han provocado grandes pérdidas.
-la fijación de los precios de la miel por el mercado internacional ha provocado que en muchas ocasiones los apicultores hayan tenido que gastar más que la cantidad que ganaron. Esta situación se produce porque casi el 90% de la miel producida en nuestro país se exporta, entonces son ellos los que fijan los precios.
Todas estas dificultades obligan a que los apicultores compren un montón de insumos para tener una cosecha y eso se expresa en el precio de la miel.
¿Cómo se han formado las empresas que hoy dominan la producción de miel?
Hace años, en Chile hubo una mortandad del 80% las abejas, provocada por un ácaro llamado varroa. Posteriormente, empresarios vinculados a la agricultura que tuvieron los recursos para informarse de esta enfermedad y cómo controlarla comenzaron a incursionar en la producción de miel.
El negocio se desarrolló, porque las plantaciones agrícolas necesitan ser polinizadas y la forma de cubrir esta necesidad es teniendo grandes cantidades de abejas que realicen esta labor. Entonces, aparte de cubrir esta necesidad, las empresas aprovechan de producir miel de forma industrial. Cuando el gobierno ha dicho que el 2010, Chile producirá 10 mil toneladas de miel. Estas no las producirán los pequeños apicultores, sino que lo harán estas grandes empresas.
Pero la producción industrial de miel ya está sufriendo el despoblamiento de las colmenas, en que las abejas no vuelven más al panal después de haber ido a buscar alimento. Una de las explicaciones que se ofrecen es que el uso de pesticidas y la modificación genética de árboles frutales ha provocado que las abejas al alimentarse del néctar de su flor, sufran efectos como la desorientación y no puedan volver al panal.
¿En qué se parece la miel y el jurel?
La transformación de la producción de miel en un gran negocio, la destrucción que han hecho las forestales de nuestro bosque nativo y la contaminación que acumula nuestro planeta provoca que cada vez sea más difícil consumir alimentos sanos y nutritivos como la miel.
La miel cada vez más cara, el jurel y la merluza cada vez más escasos y caros, y los mariscos descompuestos por el basural en que está convertido nuestro mar, se alejan de nuestra dieta. ¿Será un derecho el que podamos comer tranquilos lo que nuestro territorio nos da? Si no es así, para qué nos independizamos hace casi 200 años.