La incursión para derrocar a la revolución cubana comenzó la madrugada del 17 de abril de 1961 por Playa Larga, en el arco superior de la Bahía de Cochinos, y por Playa Girón, que fue el último reducto de los invasores derrotados el 19 de abril.
Por Alejandro Baeza
Ayer martes 19 de abril se conmemoraron 61 años desde que Cuba derrotó militarmente una invasión estadounidense realizada a través de mercenarios y disidentes. El plan consistía en que la fuerza invasora controlara un pedazo de territorio a partir de la Bahía de Cochinos, formar un «gobierno provisional» al que EEUU defendería en caso agresión de las fuerzas revolucionarias y usarlo como excusa para una intervención militar con sus fuerzas armadas.
El grupo invasor fue denominado como Brigada de Asalto 2506 o conocido simplemente como Brigada 2506 y estaba compuesto por mercenarios, opositores cubanos y funcionarios de la dictadura de Batista, formados y entrenados por la CIA en Guatemala y Miami en 1960 y equipados por el gobierno estadounidense.
No obstante, el gobierno cubano estaba al tanto que se alistaba el operativo y se preparó para aquello. Las sospechas de los extraños movimientos detectados en Miami fueron confirmadas cuando su embajador en Guatemala les informó que fue advertido por una familia de la clase alta que le contó lo que se estaba tramando en las costas del país centroamericano.
La invasión a la Bahía de Cochinos
Durante la madrugada del lunes 17 de abril de 1961 desembarcan en Playa Girón y Playa Larga alrededor de 1200 soldados de la Brigada 2506 escoltados por sus buques y se adentran en territorio cubano.
Los primeros combates fueron en el aire, donde cazas de la recién formada Fuerza Aérea Cubana derribaron siete bombarderos que acompañaban la invasión terrestre y posteriormente hundieron dos buques en Playa Larga que llevaban armamento vital para la brigada, lo que representó un duro golpe para los planes de ataque. Para sorpresa de los comandantes de la expedición, la Fuerza Aérea Cubana dominaba los cielos, contrario a lo que les informaban los servicios de inteligencia estadounidenses que les aseguraron haber derribado sus principales aviones dos días antes, sin embargo, el gobierno cubano al tanto de los planes dejó naves en mal estado o desuso en los aeropuertos para que fueran destruidos y dejó sus naves operativas en otro lugar.
Te puede interesar:Playa Girón y los internacionalistas chilenos
Si bien la incursión logró adentrarse tierra adentro con tanques, camiones de artillería y cañones, en horas de las mañana llegaron los primeros soldados de las FAR e integrantes de las Milicias Nacionales Revolucionarias, o como inmortalizaría Silvio Rodríguez «hombres negros y rojos… y azules» en alusión al color de sus respectivos uniformes, que tras horas de arduo combate, cerca del atardecer mediante artillería, disparos y bombardeos aéreos, lograron hacer retroceder a los barcos de la Brigada 2506, que no pudieron desembarcar cientos de soldados, armamento y pertrechos.
Los combates no se detienen y al día siguiente Washington envía bombarderos A-26 que tenía apostados en la Nicaragua de Somoza, que atacan convoyes y tropas, y luego huyen a territorio estadounidense para esquivar el combate aéreo y para evitar que quedara en evidencia que se trataba de un ataque de Estados Unidos.
La victoria en Playa Girón
El plan de la oposición cubana y de la CIA incluía un alzamiento del pueblo en contra del «régimen de Castro», cosa que no sólo no ocurrió, sino que la población en general se volcó a brindar apoyo a los soldados y milicianos para defender la revolución.
Y así fue como tras 65 horas ininterrumpidas de intenso combate, la tarde del 19 de abril las últimas fuerzas invasoras que quedaban se concentraron en Playa Girón, y viéndose totalmente rodeados, sin el suministro y tropas de los barcos y lanchas, con la imposibilidad de recibir apoyo aéreo y ante la presencia del mismo Fidel Castro en el lugar, se rinden mayoritariamente, mientras algunos intentan escapar por mar intentando hacer funcionar alguna malograda lancha y otros se esconden en la ciénaga. Los planes de Estados Unidos habían fracasado rotundamente.
El triunfo afianzó enormemente la revolución en Cuba, causando el efecto contrario que buscaba. La épica de la batalla fue interpretada inmediatamente como lo que es: La primera derrota del imperialismo estadounidense en América Latina.
Como dijo el Che Guevara, Playa Girón se transformó en «un símbolo para los pueblos oprimidos» en cuanto a que se podía vencer a Estados Unidos, cosa que ha estado haciendo Cuba durante 63 años.
Uno de los episodios más importantes de la historia latinoamericana y de la geopolítica de la Guerra Fría, protagonizado en gran medida por «hombres de poca niñez», voluntarios cubanos con incompleto entrenamiento militar que fueron a arriesgar su vida para defender a la revolución de un ataque del imperio más poderoso de la historia, pero que terminaron anotándose y escribiendo la historia, su historia los hombres, en Playa Girón.
https://www.youtube.com/watch?v=X__1wDLicCw&ab_channel=ResumenTV