No debiera ser sorpresa para nosotros que el paquete de medidas efectuado por el gobierno para afrontar la crisis económica tenga algo de oscuro. El Plan de Estímulo Fiscal evidencia dos realidades que ya se viven en la región;

desempleo y precarización del trabajo. Ya en otro artículo Manuel Ahumada Lillo -dirigente de la CGT-MOSICAM- examinaba la nueva ley de semana corrida, mostrando claramente la desprotección del trabajador frente a las medidas que frente a su salario, puede tomar el empleador.

Hay alguien que dice por ahí que la ignorancia es madre de toda tiranía. Y al parecer esta vez no será la excepción respecto de la gente trabajadora.

Las medidas tomadas por el gobierno no son tardías como declara la oposición o el partido comunista. Más bien -y ponga ojo en esto- las medidas van en directa relación con el interés empresarial de traspasar los costos de la crisis al trabajador. La ley de semana corrida, por ejemplo, puede ser utilizada como un instrumento legal para reducir los salarios, puesto que los porcentajes de las comisiones que pueden ganar los trabajadores estarán en total control del empleador, que manejando los porcentajes se puede lograr cumplir la ley pagando menos de lo que corresponde.

Además, es bueno revisar declaraciones de dirigentes sindicales que denuncian las posibles futuras prácticas de los empleadores. Tras el despido de los 297 trabajadores de la planta CMPC Nacimiento, el representante de los trabajadores despedidos Fernando Constanzo declaraba que las medidas de la empresa irán en relación con una nueva contratación de los trabajadores con sueldos aún más bajos y menos garantías laborales. Habría que ver si esa práctica está legalizada con las medidas del gobierno para hacerle frente a la crisis.

Bueno, no hay para que decir que las medidas son poco confiables. Un posible camino para ir superando paulatinamente los profundos problemas de nuestra región, tiene que ver más que con una solución de las empresas, con la organización de los trabajadores cesantes.

Porque si aceptamos las medidas de las empresas, estamos perdidos. Si no me cree, habría que revisar por ejemplo, el posible contrato de 100 personas en construcción de caminos rurales en Nacimiento, solución planteada por CMPC. Y también estar atentos a los trabajadores de Fanaloza, porque seguramente la empresa utilizará una estrategia similar.

La solución del gobierno frente al desempleo, es la precarización del trabajo. En mi pueblo a eso le llaman migajas.