A partir de la primera transmisión de radioteatro en Chile, el año 1932, vía radio Universo -de la obra “La Enemiga” de Darío Nicomedi- el género se desarrolló fuertemente y con auge a mediados del siglo XX, pero, sobre todo, como marca de una parte de la historia reciente de las artes escénicas de nuestro país. Si bien, con el arribo de los medios televisivos, se reconoce cierta decadencia del radioteatro, sus aportes e imaginarios son persistentes en el tiempo y hasta la actualidad, al presenciar, producto del contexto sanitario, un regreso al ejercicio de la escucha. Es diversa y rica su historia y, quizás más aún, pensarla desde nuestro presente.
Paulina Barrenechea Vergara / resumen.cl
Hay conocimiento e historia documentada sobre el radioteatro, en su deriva radiofónica, junto a los clásicos de drama, comedia y terror, y donde creadores/as como Eduardo de Calixto, Jorge Romero y Anita González destacaron. Pero también es justo sumar a la experiencia sonora los trabajos dramáticos de Leni Alexander, creadora nacional clave para la música contemporánea del siglo pasado, y compositora de una serie de obras originales conocidas como Hörspiele o "teatro para escuchar", entre ellas, “Chacabuco - ciudades fantasmas” y “La vida es más corta que un día de invierno”. Su trabajo, si bien dista del radioteatro como el género que conocemos, por sus derivas técnicas y de contenido, resulta interesante de reseñar pues abre el campo y da cuenta de las posibilidades de lo sonoro como arte escénico.
Sin duda, han existido importantes transformaciones que han afectado este género y le han hecho transitar desde el radioteatro (radiofónico) hacia la ficción sonora o teatro sonoro que se caracteriza por su carácter inmersivo y dimensión binaural. Las posibilidades que entregan los nuevos medios, las tecnologías del sonido, lo digital y la virtualidad, nos muestran un escenario revitalizado y que adquiere particularidades que no sólo son tributarias del contexto actual de encierro, sino que, también, del territorio. Actualmente, a nivel local, son varios los proyectos escénicos que, desde lo sonoro, han estado dotando de contenido los escenarios digitales, tanto de centros culturales, teatros, así como de manera independiente a través de sus plataformas y redes sociales. Esta emergencia, que tiene su propio archivo en la historia de las artes escénicas, también, supone una toma de posición en el presente y pensar lo sonoro, sobre todo, desde su dimensión política dentro de un contexto cultural que ha privilegiado lo visual.
¿Qué tensiona gira e impacta -dentro del ámbito escénico - el lenguaje sonoro? ¿Cuáles son los desafíos que en términos de mediación y a nivel educativo tiene la ficción sonora? Con esas interrogantes, conversamos virtualmente con cuatro agrupaciones que están desplegando un trabajo escénico desde este lenguaje y que tienen algo que decir a partir de sus propias prácticas. Que sea este cruce de experiencias un gesto de archivo y un espacio para conocer los procesos creativos y saberes detrás de los proyectos de La Gaviota Podcast, de La Obra Teatro, de La Peste Teatro y de La Porfía.
[caption id="attachment_79906" align="aligncenter" width="768"] La Obra[/caption]
La Obra Teatro y lo sonoro como ficción feminista
Es primera vez que La Obra Teatro se enfrenta a la ficción sonora. Su obra en escenas “El Órgano de los Susurros. Obra cadáver-Obra parlante”, está siendo entregada semanalmente a través de sus redes sociales y ha sido la forma de mantener un contacto permanente con sus audiencias durante la contingencia. Lo entienden como un desafío en términos creativos, pero también como un reflejo de la forma de trabajo de la compañía, develando los pulsos políticos de lo colaborativo, lo interdisciplinario y los saberes de las mujeres creadoras de su equipo. Si bien para la compañía, dirigida por la dramaturga de Coronel Gisselle Sparza, el mundo sonoro es instituyente en sus obras; esta vez exploran otros soportes y otros lenguajes como el poético y lo visual.
“El Órgano de los Susurros. Obra cadáver-Obra parlante” es una creación de ficción sonora que está basada en la escritura poética de seis mujeres integrantes de la compañía. Son nueve escenas, que replican el juego del cadáver exquisito (ligado a las vanguardias artísticas de las primeras décadas del siglo XX), y que fueron compartidas durante todo el mes de julio en sus redes sociales. Juntas conforman una obra integral a estrenarse próximamente. Gisselle Sparza (dramaturga), Marta Fernández (Técnica en sonido), Natalia Figueroa (productora y mediadora), Juanita Paz Saavedra (bailarina), Francisca Díaz (actriz) y Javiera Hinrichs (intérpete y directora musical) son las creadoras que dan vida a esta ficción sonora, mostrando a través de sus escritos poéticos una faceta no tan conocida por sus pares. Gisselle comenta que no es fortuito el hecho de que las autoras sean todas mujeres, pues se trata de una posición política que atraviesa el quehacer de la compañía.
[caption id="attachment_79903" align="aligncenter" width="900"] La Obra[/caption]
“Para las compañeras que han escrito las escenas, también, es un espacio que les brinda la oportunidad de lanzarse a expresar desde otro lugar, dejándose sorprender por la combinación que luego surgirá a partir de sus escritos, en el encuentro con la música, la interpretación y la imagen. El cruce de lenguajes siempre es algo que nos ha inquietado como compañía. En esta obra es la música la encargada de hilvanar la totalidad de escenas y no la palabra. La coherencia intelectual aquí no existe, pues es una obra cadáver que propone un puente emotivo y libre a los y las oyentes. Romper el confinamiento a través del uso de la imaginación, durante los breves segundos que dura cada escena, es viajar y no implica solamente el cuerpo, sino que hay miles de maneras de hacerlo”, comenta Gisselle.
Frente a los desafíos que supone la ficción sonora, comenta que el camino es largo en términos de aprendizajes, pero que ello va de la mano con el potencial que lo sonoro tiene. ”Creo que nos queda mucho que aprender en materia de Foley, en relación a lo técnico. Considero que la ficción sonora es un buen canal para ser utilizado con el público, de todas las edades, ya que puede ser una invitación a jugar con lo sonoro, a experimentarlo en primera persona y no solo como oyente. es decir, usar este medio como obra mediadora.También creo que podemos potenciar el trabajo de artistas regionales, usando las creaciones musicales, escriturales de compañeras locales”.
Si quieres escuchar/ver las nueve escenas de “El órgano de los Susurros. Obra cadáver-obra parlante”, puedes hacer en las redes sociales y el canal YouTube de la compañía.
Facebook: https://www.facebook.com/laobrateatro
Instagram: @teatrolaobra
Canal Youtube: https://www.youtube.com
[caption id="attachment_79901" align="aligncenter" width="900"] La Peste[/caption]
La Peste Teatro y lo sonoro como mensaje social
Integrada por la actriz y fonoaudióloga Claudia Toro, el ingeniero en sonido Fernando Poveda y el actor y director Diego Nacho Alarcón; La Peste Teatro nace este año 2020 y ya estrenaron su primer montaje de teatro sonoro Amonio Cuaternario. Bajo una mirada interdisciplinaria y desde un enfoque de género, la compañía eligió el soporte sonoro para poner en escena su primera obra. Diego comenta que lo hacen pensando en “retomar el sentido primario de la escucha, que fue nuestro primer medio de almacenamiento valioso de información, de recopilación de historias. Complementarla con toda la tecnología de grabación, edición, producción, plataformas digitales, etc.. que existe en la actualidad, evoluciona las pasadas prácticas y da como resultado interesantes paisajes sonoros y atractivas dramaturgias sonoras que, quizás, anteriormente, no hubiesen tenido cabida o posibilidad de ser gestadas y compartidas. Es por eso que el arte no puede dejar de reinventarse, y uno tampoco”.
La Peste viene desarrollando procesos creativos bajo las premisas del teatro de la crueldad, trabajo colectivo que han desplazado a experiencias y urgencias del presente. Claudia Toro comenta que el lenguaje sonoro les ha permitido materializar dicho trabajo, que en la dramaturgia de Amonio Cuaternario está entramado con la contingencia y las experiencias de violencia de género que han aumentado en contexto de encierro.
“Pretendemos continuar abordando temáticas relacionadas con la violencia de género, con una mirada crítica en cuanto al rol de la sociedad en el acontecer actual y más aún en el contexto de cuarentena. Desde esta trinchera, es que nos proponemos visibilizar y denunciar prácticas nocivas que se camuflan dentro de la normalización de nuestra sociedad y las nefastas políticas que existen para poder afrontar esta problemática. Desde este género, nos proponemos interpretar los diversos lenguajes escénicos adaptados a la contingencia, a través de diversos soportes de exploración vocal, arte sonoro y audiovisual, ensamblando de esta manera un cruce transdiciplinario para promover la cultura y arte local”, explica Claudia.
Fernando Poveda, sonidista de la compañía, corrobora el pulso creativo colaborativo de este primer montaje sonoro, al estar involucrado desde un inicio en la escritura y los ensayos de la obra. “Los dos temas que suenan, la intro y out, así como el jingle de Ángel Face, son composiciones originales hechas a medida para la obra, basadas en referencias que me entregaron Claudia y Diego y que dan una gran particularidad a este mundo imaginario. La obra captará la atención de quien esté dispuesto a imaginar y escuchar el reflejo de está realidad que sucede a diario, no solo en la región, sino que en el país y el mundo”. Puedes escuchar Amonio Cuaternario en las plataformas digitales de La Peste Teatro y su canal youtube.
Instagram: @Lapesteteatro
Canal Youtube: https://youtu.be/W67_jvzs5LA
[caption id="attachment_79905" align="aligncenter" width="900"] La Porfía[/caption]
La Porfía y lo sonoro como escritura que suena
La Porfía tiene un archivo de dos obras montadas desde el año 2019. La primera, dirigida por la actriz Francisca Díaz, Isabel Desterrada en Isabel (una reversión de la obra de Juan Radrigán), y la segunda, bajo la dirección de Cristóbal Troncoso, Una pala y un sombrero (de Menchy Macaya). Ambos directores, integrantes de este núcleo de trabajo escénico, se unen en el proyecto Las ciudad enfermas y otros relatos penquistas. Junto a ellos/as, el músico Rodrigo Álvarez, se suma con su trabajo compositivo y de registro de los paisajes sonoros en la ciudad. Próximo a estrenarse, este proyecto, pensado como un radiocuento o audiocuento, supone el desafío de desplazar lo narrativo a un lenguaje teatral. Tienen como punto de partida la narrativa breve pero que, “a pesar de ser escritura, suena”, exponen.
En pleno proceso creativo, de composición y grabación, el equipo reconoce dos pulsiones que atraviesan esta propuesta. La primera está relacionada con la vinculación identitaria con los imaginarios del Gran Concepción, a través del trabajo literario de autores locales como Jorge Luengo Espinosa (1985-2013), cuya pluma dará vida a esta primera temporada del proyecto. Existe, además, un correlato desde la visualidad, a cargo del artista Luis Almendra, quien dotará de nuevos contenidos los textos de Jorge. La segunda, está articulada a una pulsión comunitaria e inclusiva que hará circular esta obra, fundamentalmente, en radios locales, creando, también, espacios de mediación y divulgación.
“Nuestro desafío más grande es llegar a una audiencia significativa y de manera inclusiva. Es decir, no detenerse en el formato de podcast, si no que ampliar la llegada a radios de pueblos, poblaciones, comunales. Queremos llegar a las personas que aún son radioescuchas, que mantienen la rutina radial”, comenta Francisca Díaz, intérprete y guionista del proyecto. Además, comparte que lo sonoro les ha brindado la posibilidad de activar un gesto de archivo territorial, pues “hay voz, un paisaje sonoro y una música, y esos tres elementos dialogan generando complicidad, contradicción y dando mayor expresividad a la creación. Al estar estimulando la escucha, se genera la posibilidad de ser arte más inclusivo, al no depender su goce de la vista, y, por otro lado, a conectarnos con lugares de nuestros receptores que no siempre estamos utilizando en su 100%. Es una manera distinta de sensibilizar frente a lo creativo”. Rodrigo Álvarez complementa esa mirada al considerar que paisaje sonoro sitúa el relato en un lugar particular y, “en ese sentido, el impacto recae en las disciplinas artísticas locales. Sé que el paisaje sonoro se ha utilizado en otros tipos de performance, pero generar capítulos de cuentos no se ha hecho hace un buen tiempo en nuestra ciudad”.
Durante el mes de noviembre se realizarán las primeras entregas del radiocuento, así es que la invitación es a estar atentas/os a las redes sociales de La Porfía Teatro, pues estarán compartiendo parte del proceso creativo del proyecto.
FanPage: https://www.facebook.com/laporfiateatro/
Instagram: @teatrolaporfia
[caption id="attachment_79902" align="aligncenter" width="900"] La Gaviota Podcast[/caption]
La Gaviota Podcast y lo sonoro como y por una cultura de la escucha
El proyecto de La Gaviota Podcast suena fuerte actualmente gracias a las temporadas que tienen como parte de la programación online del Teatro Biobío. Pero, antes de eso, y en contexto de urgencia sanitaria, ya venían compartiendo en sus redes este proyecto de teatro sonoro y generando un referente a nivel regional valorado, sobre todo, por su pares. La Gaviota Podcast está integrada por la actriz Patricia Michele y el músico e ingeniero en sonido Óscar Oviedo, dupla escénica que ha encontrado en el lenguaje sonoro una potente posibilidad para, sobre todo, visibilizar el trabajo de dramaturgos y dramaturgas locales. Junto a ello, el proyecto, ya con once obras montadas sonoramente, les ha permitido ampliar las posibilidades creativas de lo escénico e ir potenciando un género con alto potencial transformador.
Sobre aquello que define su trabajo, ambos coinciden en que el teatro sonoro que comparten y desarrollan abre la posibilidad de que el espectador pueda completar, desde su imaginario, el paisaje, el espacio y los personajes de cada obra. “Esta es una de las cualidades más potentes de este formato, por qué se crean universos distintos en cada oyente al escuchar la misma historia. También las posibilidades infinitas que entrega la grabación de sonido y la edición de audio a través de planos, dinámicas, timbres, silencios, es posible expresar emociones e ideas a través del sonido. Otra de las cualidades es que se enfoca la atención en otro sentido que no es la visión, y esto debido al contexto, resulta ser una especie de respiro para la vista”.
[caption id="attachment_79907" align="aligncenter" width="768"] La Gaviota Podcast[/caption]
Al trabajar con dramaturgias, sobre todo, de creadores y creadoras actuales, el trabajo creativo se vuelve aún más sensible, atendiendo a una multiplicad de dimensiones que, sin duda, ha definido un modo de hacer que define no sólo al proyecto sino que a sus respectivas formas de enfrentar lo escénico. “La experiencia que tenemos ambos en nuestros roles, hace que logremos sensibilizarnos rápidamente y casi de manera sistemática con cada una de las obras a las que nos enfrentamos. La música original que se transforma en un narrador más, también hace de nuestro trabajo algo particular, y como los dos nos transformamos (gracias a la ingeniería en sonido) en seis, en ocho o en tres, dependiendo de cuantos personajes necesitemos interpretar”, comentan.
Dentro de las posibilidades y desafíos que el teatro sonoro tiene como soporte para lo educativo y su potencial mediador como práctica artística, asumen que, sin duda, llegar a una comunidad más amplia es un objetivo. En ese sentido, el regreso a las radios se vuelve importante, así como continuar descubriendo la diversidad de subgéneros que tiene la ficción sonora para co construir una cultura de la escucha. “Comenzamos a explorar este mundo sonoro desde la teatralidad y consideramos también un desafío que esto pueda perdurar para que siga evolucionando. Desde la ingeniería en sonido, un desafío es estudiar la psicoacústica y así ser conscientes de lo que sucede a nivel neuronal en el oyente al momento de escuchar. Otro desafío es generar una cultura de la escucha, que se sustente en auditores activos y conscientes de los recursos técnicos necesarios para lograr una escucha de calidad”, comentan asumiendo, no sólo la riqueza que tiene el lenguaje sonoro en términos técnicos sino que, también, en su dimensión política y social como práctica transformadora desde/para las artes escénicas.
Si desean escuchar el archivo de obras de La Gaviota Podcast, pueden acceder a sus canales digitales en:
Spotify: https://open.spotify.com/show/7sl5qj3jy5xKQl8rYuWwmh
Apple Podcast : https://podcasts.apple.com/cl/podcast/la-gaviota-podcast-audioteatro/id1513275205