El 14 de octubre algunas facultades de la UNAM como Filosofía y Letras y Ciencias Políticas y Sociales amanecieron en paro y realizaron brigadeos informativos en otras escuelas. Más tarde, facultades que han participado en las movilizaciones en apoyo a los normalistas de Aytozinapa, como la de Arquitectura, comenzaron también procesos asamblearios y se declararon en paro activo.
La Asamblea estudiantil de la Facultad de Filosofía y Letras de la UNAM está convocando a un acto político con estudiantes de Ayotzinapa en Ciudad Universitaria, el miércoles 15 de octubre a la 11:00 horas, frente a la Biblioteca Central.
Una concentración frente a la PGR, el miércoles 15 de octubre a las 16:00 horas.
Marcha nocturna con velas, el miércoles 22 de octubre, del Ángel de la Independencia al Zócalo, a partir de las 18:00 horas.
Uno de los estudiantes, de posgrado, de quienes han impulsado el paro en Filosofía y Letras informó que, además de ellos, están en paro decidido por asambleas de base Ciencias Políticas, Trabajo Social, CCH Sur y la FES Zaragoza. Esperaban que en el transcurso del día 14 se sumaran facultades como Ciencias, Economía y tratarían de iniciar asambleas en el mayor número posible de escuelas y facultades.
Acerca del análisis de la situación que compartieron en la asamblea de Filosofía y Letras y las consideraciones por las cuales decidieron el paro, explicó:
“El primer elemento que mueve es la brutalidad de la represión. El hecho de que haya 43 estudiantes desaparecidos, que fueron detenidos por la policía y luego desaparecen. La muerte de varios de esos compañeros, el modo como fueron asesinados con tanta brutalidad, es lo primero que mueve a la comunidad y que la llama a discutir y a trata de entender qué está pasando.
“Conforme va avanzando la discusión van apareciendo elementos que van dando sentido al evento: uno de ellos es la decisión que se ha tomado desde hace mucho de eliminar a las Normales rurales y lo que eso implica en términos de la defensa de la existencia de la escuela. No están peleando por mejores condiciones o por democratizar sus decisiones, están peleando por que la escuela sobreviva. Y el gobierno está peleando por desaparecer a las Normales rurales. En ese sentido se entiende más la escalada de violencia.
“Y el otro elemento que se ha analizado mucho en la Facultad es la simbiosis absoluta entre el Estado y la delincuencia. El cómo cada vez hay menos instancias a las que se pueda recurrir porque todas están involucradas o cooptadas y que las máximas instancias del poder dejan que eso suceda mientras no afecte sus negocios importantes.
“También un elemento importante que se tomó en consideración es lo que está pasando en el Politécnico, donde consideramos que la lucha de los compañeros ha dado un salto cualitativo muy importante. Ya lograron la destitución de la directora, pero la otra demanda era la democratización del Politécnico y ante esa demanda el gobierno no había respondido. Ahora los compañeros hacen propuestas concretas como la votación libre para elegir al nuevo director y un congreso politécnico.
“Es un tema que nos atañe muy directamente porque lo que pasa en el Politécnico va a tener repercusiones en la UNAM, en términos de lo que se pueda democratizar a la institución. En ese contexto hicimos el análisis que nos llevó a decidir participar activamente en esa lucha y tratar de informar, de extender la discusión y de ser parte de este movimiento que tiene esos dos ejes: la defensa de la educación y el cese a la represión, y en este momento la presentación de los compañeros desaparecidos.”
Se ve no solamente como solidaridad sino como la defensa de los estudiantes y la educación pública.
“Sí, claro. Todas las reformas que ha impulsado Peña Nieto tienen un sentido en contra del pueblo, pero en particular la reforma educativa afecta a un sector sensible, no sólo a los maestros sino que tiene un correlato, la reforma educativa, en modificaciones al plan de estudios, en recortar materias críticas, en sacar más dinero de la docencia para llevarlo a la investigación al servicio de las instituciones privadas, o sea que es todo un paquete de medidas que tiene la intención de privatizar la educación, no en el sentido de volver privadas a las escuelas públicas sino en el sentido de privatizar los resultados que da la educación para que se los lleven las empresas privadas y que los grandes problemas de la sociedad mexicana no estén atendidos por las universidades.
“Mientras este proyecto vaya avanzando, que ha avanzado, en la UNAM también, hay que decirlo, han habido reformas a los planes de estudio que le quitan el filo crítico a cómo se preparan los estudiantes; en la medida en que esas reformas van avanzando a nivel nacional, van poniendo en riesgo la educación que hemos defendido en la UNAM por mucho tiempo. Sí es una onda de estar en primera línea en defensa de la educación.”
Y en el caso de los normalistas de Ayotzinapa asesinados y los desaparecidos, además de identificarse con el caso los estudiantes, se suma el sector de las víctimas que es muy numeroso en México.
“Es es importante porque desde que entró Peña Nieto se preocuparon mucho por lavar esa parte de la imagen, pero nada más por lavar la imagen. La realidad es que siguen dejando que avance el problema de la delincuencia cooptando al Estado. Es obvio que ellos saben quiénes son los que está coludidos y los dejan actuar hasta que llega un problema que les estalla, sobre todo a nivel internacional, que es cuando más les preocupa, y entonces toman medidas de maquillaje, simplemente para apagar el asunto, pero no hay ninguna propuesta para resolver de fondo el problema, porque no hay ni siquiera un análisis, sino nada más apagar el asunto y que siga corriendo la cosa.
“Es importante que se evidencia la situación, que se evidencia el gobierno, que se le exijan respuestas, pero también es importante que desde otros espacios vayamos pensando en esas respuestas, porque difícilmente van a venir de un Estado tan podrido como el que tenemos.”
La concepción de que el Estado garantiza o custodia los derechos humanos se desfonda, ¿y ahora quién es el interlocutor?
“Esa es una de las cosas que se discutió ampliamente en la asamblea de la Facultad, porque nos damos cuenta de la contradicción. De repente lanzamos consignas como “Castigo a los responsables de los asesinatos”, y luego hay compañeros que cuestionan: “¿y quién los va a castigar si son los mismos jueces y los policías los que están coludidos con el narcotráfico?”
“Es una discusión abierta, es una discusión en la que tenemos que pensar todos: ante la ausencia de Estado, ¿qué procede? Una primera idea es que hay que fortalecer la unidad del pueblo, la unidad de los sectores de abajo, los que están organizados, pero una ruta de respuesta todavía no se tiene. Y creo que es importante que sigamos discutiendo en ese sentido y que sigamos trabajando, porque también en la medida que avance el movimiento vamos encontrando esas formas de organización.”
En este caso vemos que el proceso es asambleario…
“Sí. De hecho la asamblea interuniversitaria que se reunió el viernes lanzó la propuesta de parar y también lanzó explícitamente la propuesta de que los paros se realizaran con asambleas en las escuelas.
“En este momento no nos sirven paros decididos por colectivos o por grupos pequeños que cierren la facultad sobre la voluntad de las comunidades. Estamos preparándonos para una lucha de largo plazo, que además tiene que ser una lucha que la gente asuma con mucha conciencia y convicción, y preferimos entrar en procesos de discusión que pueden ser más largos, que pueden ser desgastantes, pero que a la larga nos dejan mejores resultados que tratar de decidir entre unos pocos. Entonces sí, ahorita todos están por procesos asamblearios.”
Además de la marcha están convocando a que se realicen protestas en los consulados a nivel internacional…
“Sí, eso es la semana que entra. La reunión de los compañeros de Ayotzinapa con los organismos de derechos humanos convocó un día de acción global para el 22 de octubre, y en ese sentido es que se está llamando a que en la mayor cantidad de países se pueda presionar a las embajadas y los consulados mexicanos, además de la movilización que va ha haber aquí, que va a ser a las seis de la tarde del Ángel al Zócalo, con velas."
Finalmente, exhortó a participar:
“El paro dura 48 horas. Es importante que los estudiantes se acerquen. Hay diversas actividades, para ir a brigadear, pero también la reflexión, justo para resolver esto problemas en los que estamos atorados de a quién dirigirnos, cuál es nuestro interlocutor, cómo nos podemos organizar.
“Es muy complicada la situación que estamos viviendo, así que requiere de mucho trabajo, pero también mucha reflexión. Convocamos a las dos cosas, con el paro.”