Protestas se multiplican por las principales ciudades del mundo, condenando el salvajismo israelí, con pasividad la ONU y los gobiernos del mundo contemplan la masacre.
Las protestas que se iniciaron en Medio Oriente y que fueron reprimidas por lo gobiernos árabes, se han extendido por las principales ciudades europeas, asiáticas, africanas, oceánicas y americanas. En Madrid, Barcelona, París y Londres estallaron enfrentamientos con la policía.
En Madrid 250 mil personas desfilaron por las principales calles de la ciudad, en Barcelona se estimo el número de manifestantes en 200 mil personas, las críticas apuntaban tanto a Israel como Estados Unidos, pero también a la pasividad de los organismos internacionales y de los principales gobiernos europeos, llamando a una “decidida y urgente acción a favor de los habitantes de Gaza”. Los manifestantes reclamaban un boicot a los productos israelíes y que los gobiernos europeos no vendan más armas al estado hebreo. Se gritaron consignas como "Israel asesino del pueblo palestino", "Todos somos palestinos", " Vosotros sionistas sois los terroristas "," Israel matando, la ONU mirando ","Israel matando, Europa mirando, "No es una guerra, es un genocidio", "Israel necesita jarabe vietnamita"... También se oyeron gritos de "Viva Chávez" en reconocimiento al presidente del país venezolano, el único que hasta ahora ha roto relaciones con el estado sionista.
En Francia la nación con la mayor comunidad musulmana y judías de Europa, se comienza a vivir crispación social y la mayoría de la población francesa acusa al presidente Sarkozy de complicidad con los crímenes del Estado de Israel. El lunes pasado tres jóvenes lanzaron un coche incendiado contra el portal de una sinagoga de un barrio popular de Toulouse, otros incidentes violentos se han venido repitiendo en diversos barrios de las principales ciudades francesas.
Un sector de la colectividad judía tanto de Francia como Inglaterra, ha participado de las manifestaciones en contra de la agresión del estado Israelí y se desmarcan de las políticas genocidas del Estado Hebreo y ha hecho el llamado a no confundir al pueblo judío con los fanáticos sionistas que hoy gobiernan Israel.