La ONG Cristosal anunció el cese de sus operaciones en El Salvador, denunciando la creciente criminalización bajo el régimen de Bukele y señalando que el país ha dejado de ser un Estado de derecho, en medio de un clima de persecución contra defensores de derechos humanos.
Esta semana Cristosal, la principal ONG humanitaria presente en El Salvador, informó que suspenderá sus operaciones en El Salvador ante la escala de criminalización que se ha sostenido en el país centroamericano.
A través de un comunicado público, la organización señaló que «el régimen de los hermanos Bukele ha desmantelado los principios básicos de la democracia. Bajo un estado de excepción permanente y con control casi absoluto de todas las instituciones, El Salvador ha dejado de ser un Estado de derecho».
Te puede interesar| Entrevistas a líderes pandilleros muestran cómo Nayib Bukele cimentó su régimen con el apoyo de criminales
La medida de Cristosal se da en un escenario de abierta persecución hacia opositores al régimen de Nayib Bukele. Periodistas, activistas ambientales y defensores de Derechos Humanos se han visto a exiliarse por amenazas que han ido en escalada.
A esto se suma el caso de Ruth López, abogada y defensora que forma parte de Cristosal y que se encuentra detenida, indica la organización, «por exigir transparencia y denunciar la corrupción».
Si bien Cristosal mantendrá sus operaciones desde Guatemala y Honduras, la salida de El Salvador también permitirá seguir «reorganizando para cuidar nuestras voces y aportar para que la defensa de los derechos humanos se mantenga viva, libre y al servicio de las víctimas», señalaron.