Putin-fobia, o el guión del fraude mediático del Occidente


Encabezado por Estados Unidos (EUA) y su escudero Unión Europea (UE) , el Occidente trompetea a los cuatro vientos el acorralamiento del anticristo Vlad!

Su nombre completo: Vladimir Vladimirovich Putin. Eslavo como el vampiro Tepes, ¡es el príncipe de las sombras, este hijo de … las estepas!

“Empalador serial” sería descripción más ajustada al vocabulario juridico: “mató” a los 298 pasajeros y tripulantes del vuelo MH17 de un solo palo. Perdón: ¡con un solo mísil!, como sugiere el falsete.

Así el Occidente trompetea la trampa.

Demonización y doble estándar

¿Pruebas para qué? ¡Si no lo hizo, lo quizo!

Porque Putin...“Es duro, arrogante y fundamentalmente inseguro” - ex secretaria de Estado, Hillary Clinton (The Telegraph, 27/7/2014);

Es un oligarca: “Tiene un patrimonio personal de 80 mil millones de dólares” - David Collins (The Mirror 24/7/2014);

“Habla con ojos de réptil” - (Before it´s news, 24/7/2014);

“¡No tiene alma!” - Joe Biden, vice-presidente de EUA (Reuters, 21/7/2014);

Es un “dictador en su laberinto – parece que no va durar mucho” - Ben Judah (The  Independent , 25/7/2014).

¡Oligarca arrogante y desalmado con ojos de cocodrilo! Y encima, solitario y paranoico: “Vladimir Putin emplea full time um probador de alimentos para estar seguro que su comida no esté envenenada” - John Walsh (London Independent, 24/7/2014).

Si me preguntan, digo: ¡el ruso parece malo de verdad!

Es que así me lo enseñan Fox y CNN, el Telegraph y Der Spiegel, Veja de Brasil, El Mercurio de Chile, El País de España y el Independent de Londres – que de “independientes” no tienen nada. Más bien recuerdan el perrito de RCA Victor: reproducen “His master´s voice” - la voz del dueño.

¿Quienes son los dueños?

Es muy probable que por la trivia originalmente publicada en Newsweek y reproducida por Independent, los dos diarios no le hayan pagado un centavo a Ben Judah. Es que la mayoria de sus textos Judah los escribe para Open Democracy, una ONG financiada por el mega-especulador George Soros, el ministerio noruego de relaciones exteriores y las fundaciones Rockefeller y Ford; recordando que ya en la era Boris Yeltsin, en los años 1990, Open Society – también de Soros – entrenaba a changemakers, “emprendedores sociales para la joven democracia rusa”.

Del cuarteto citado, se recomienda guardar el nombre George Soros, al que el texto volverá a referirse.

Mientras tanto, ¡nuevas sanciones!

Pieter Broertjes, alcalde de Hilversum, cobró de las autoridades holandesas la deportación de Maria Putin (29), hija del  presidente ruso. En las redes sociales María fue insultada y amenazada: “Bitch, go home - !Vayase puta!”. Después, el alcalde dio vuelta atrás, pero María se fue de Holanda, porque no había garantías para su vida.

En Estonia, el actor, judoca y jazzman norte-americano, Steven Seagal, fue expulsado de forma truculenta  del  festival de blues Augustiblus, porque es amigo personal de Putin y recientemente defendió el referendo realizado en Crimea.

“¡Hay que cancelar el Mundial de Fútbol en Rusia! - vociferó Michael Fuchs, vice-presidente de la bancada democristiana en el Parlamento alemán (BBC, 23/7/2014). Dijo: ”Un tipo que no se hace responsable del control aéreo de Ucrania (sic!), ¡no se merece el Mundial de 2018!”

Una consulta: ¿Habrá sido victima de un acto fallido o de un burn out geográfico el diputado Fuchs? Si al mismo tiempo todos gritan “¡Putin, fuera de Ucrania!”, estando Vladimir en Rusia, ¿como se le ocurre al congresista alemán responsabilizar ahora al mandatario ruso por el espacio aéreo de Ucrania?

Sobre la masacre de la problación rusófona, ¡ninguna palabra!

Según el informe del ministério ucraniano de la Salud (Kyiv Post, 10/7/2014), la campaña punitiva de efectivos del ejército y milicias fascistas mató a 478 y hirió a 1.392 civiles en Mariupol, Donets y Slaviansk. Otro informe, de la Misión Especial de Monitoreo de la OSCE-Organización de Seguridad y Cooperación en Europa, registró 250 civiles muertos apenas en Lugansk, sin hablar del incendio criminal y brutal asesinato en Odessa de 40 simpatizantes pró-rusos por las milicias del oligarca israelo-ucraniano Igor Kolomoisky.


Vuelo MH17: ¿accidente o operativo falsa bandera?

El script de la campaña se lee como diario viejo o película déja vu.  La táctica es crear una “atmósfera” para responder con “hechos”: demonizar para justificar una guerra.

Fue así con las falsas “armas de destrucción masiva de Saddam Hussein”, los mentirosos  “bombardeos genocidas de Muammar Gaddafi”, las insidiosas “armas químicas de Bashir Al Assad”.

Creada la “atmósfera”, entonces Irak fue invadido y Saddam asesinado, Líbia bombardeada y Gaddafi descuartizado, y Síria...

¡No, Síria no! Voto vencido en el caso de Líbia, con una sabia y creativa estrategia, Vladimir Putin desarmó la amenaza del bombardeo y ocupación de Síria. En trama paralela, mientras gobierno y medios americanos apoyaban los intentos de golpe de la derecha en Venezuela, el presidente jamás vaciló en apoyar el fragilizado gobierno chavista y proteger Irán contra las amenazas de Israel y su lobby en Washington DC.

Así Putin se hizo el “comandante del império del mal”, atributo agrabado por su defensa de Osetia contra el asalto de Georgia, y el apoyo a la mayoría rusa en Crimea y las províncias del Este Ucraniano.

Desenmascarados ante la opinión pública mundial por su financiación de hordas fascistas y su apoyo al régimen golpista instalado en Kiév, EUA y UE esperaban por algun incidente que igualara el juego contra Putin - y el derrumbe del vuelo MH17 fue el pretexto que literal y desgraciadamente les cayó del cielo.

El repertorio de los fraudes está hartamente documentado, las incongruencias y mentiras vergonzosas no han producido “pruebas”.

–                    las grabaciones de las conversaciones entre el vuelo MH17 y la torre de control de Kiev fueron requisitadas por los servicios de inteligencia del régimen ucraniano y desaparecieron. La pregunta que no  quiere callar: ¿por qué la torre autorizó el sobrevuelo en línea recta de la zona de combates?

–                    el video con el supuesto audio de una conversación entre un separatista ucraniano y su comandante ruso, en el que hablan de un avión derrumbado, fue subido a Youtube un día antes de la tragedia;

–                    la foto con un supuesto miliciano separatista de pie en frente a un lanzador de mísiles BUK, en verdad muestra el uniforme del ejército ucraniano;

–                    si la Armada de EUA realizaba maniobras con Bulgaria a pocos centenares de quilómetros del este de Ucrania, ¿cómo es posible que no tenga imágenes trazadas del vuelo MH17 o registros térmicos de un mísil, si los espías de la NSA logran pinchar el celular del la cancillera Angela Merkel, en la lejana Alemania?

¿Y qué decir del reportaje de BBC, en el que fue editado, pero en seguida borrado el testimonio ocular de ucranianos del este, que vieron el derrumbe del MH17 por un avión de combate? https://www.youtube.com/watch?v=zUvK5m2vxro


El cerco a Rusia

Mas allá de Putin y Ucrania, hace un cuarto de siglo, distintos planes de desestabilización de Rusia están en curso. Su más destacado estratega es Zbigniew Brzezinski, ex consejero de seguridad de Jimmy Carter y masternind geopolítico del Partido Demócrata.

En los años 1990, Brzezinski fue el mentor del operativo en Afganistán, cuando la CIA financió y armó los mujahidin de Osama Bin Laden para desestabilizar a la entonces URSS en un conflicto interminable – y la URSS tuvo que retirarse. Con muchas bajas, Afganistán fue su Vietnam.

La misma política del “cordón sanitario” le vienen imponiendo a Rusia pos-sovietica los succesivos gobiernos de EUA, con la coerción de Polonia, Georgia y Moldavia, y las repúblicas caucásicas de Kirguistán y Tajiquistán.

Dos graves provocaciones Putin jamás podría perdonarselas a los EUA: la instalación de la Planta Interceptadora Europea (PIE) - que permite el completo monitoreo del territorio ruso por el sistema electrónico americano - y el entrenamiento de las bandas nazi-fascistas y terroristas de Plaza Maidan en Polonia. Uno de los financistas del entrenamiento fue la fundación “Renaissance” de George Soros.

Cuestionados, EUA pretextaron que PIE era una “defensa contra mísiles de Irán”.

El año 1997, en su libro “The Grand Chessboard” [El Gran Tablero de Ajedrez], Zbigniew Brzezinski advirtió que “... sin Ucrania, Russia cesa de ser un Imperio Euro-Asiático... De todo modo, si Moscú readquiere control sobre Ucrania, automaticamente Rusia reconquistará los medios vitales para tornarse un poderoso Estado imperial, tendido de Europa hasta Ásia”.

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