[resumen.cl] Cargos por incumplimientos ambientales formuló la Superintendencia del Medio Ambiente (SMA) contra la planta Horcones de Celulosa Arauco (Grupo Angelini). Mientras que uno de los cargos esta relacionados a incumplimientos en el cierre de un vertedero de residuos sólidos y la afectación al ambiente circundante, otro está relacionado a la descarga de un químico antiespumante a las aguas del Golfo de Arauco.
El 27 y 28 de agosto de 2014, funcionarios de la SMA, la Seremi de salud de la región del Bio-Bio y el SAG realizaron inspecciones ambientales a la instalación del Centro Forestal Industrial (CFI) Arauco Planta Horcones. Estas fiscalizaciones constataron que no se ejecutaron las obras de cierre del antiguo vertedero industrial de la planta Horcones, en específico las etapas I y II, en los sectores A y B, y la etapa 1 en el sector C. Estas obras corresponden a corrección de la pendiente de taludes, perfilamiento y compactación de la capa superficial" señala el informe.
En la fiscalización se reportaron "deslizamientos en los taludes, los que verificaron que la falta de medidas de control afectó la vegetación arbórea perimetral destinada a controlar el arrastre del material particulado por efecto del viento, aumentando la superficie originalmente ocupada por el vertedero de residuos industriales"
Además, el informe señala que exámenes de registro fotográfico y antecedentes en el acta de inspección, verificaron que "no han sido implementadas las medidas de control de impactos comprometidos en la RCA, para las etapas I y II del plan de cierre aprobado, permitiendo que el vertedero antiguo pierda estabilidad estructural en su plataforma superior y taludes laterales, y ocasionando el libre escurrimiento de aguas lluvias con contacto directo con los residuos industriales sólidos, deslizamiento de residuos por los taludes no re-perfilados, sin contar con las medidas de control y contención requeridas para evitar la afectación de la calidad del suelo, calidad del agua y calidad de la flora circundante".
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El 21 de abril de 2015, funcionarios de la SMA, la Seremi de Salud del Biobío, el Servicio Agrícola ganadero (SAG), la CONAF y la gobernación marítima de Talcahuano, realizaron inspecciones ambientales en la planta Horcones en materias como: estabilidad del depósito de residuos industriales sólidos en su etapa de cierre, afectación de fauna, manejo y control de residuos sólidos, manejo y almacenamiento de sustancias químicas peligrosas, y manejo y control de residuos industriales líquidos.
Con respecto a las obras del depósito, el informe señala que la empresa no a ejecutado el cierre de las etapas I y II en los sectores A, B, y C con las tres capas que habían sido propuestas para controlar la erosión en los taludes exteriores. De esta forma, se verificó que la empresa no ejecutó las obras asociadas a la RCA del año 2012, lo que causó que el Depósito de Residuos Industriales Sólidos No Peligrosos (DRIS) perdiera estabilidad estructural en su plataforma superior y los taludes laterales "ocasionando el libre escurrimiento de aguas lluvias con contacto directo con los residuos industriales sólidos, deslizamiento de residuos por los taludes no re-perfilados, sin contar con las medidas de control y contención requeridas para evitar la afectación de la calidad del suelo, calidad del agua y calidad de la flora circundante" detalla el informe.
Además, en la fiscalización se verificó que "la empresa se encuentra adicionando sustancias químicas (antiespumante), aguas abajo del punto de control" que estaba autorizado. Ante esto el informe señala que: "el muestreo de autocontrol efectuado por el establecimiento emisor, no es representativo de la condición final del residuo industrial líquido, previamente tratado,antes de su descarga al medio marino receptor" Agregando además que no hay información del autocontrol bajo esta nueva condición, debido a que también se desconocen las cantidades de antiespumante aplicadas, así como su concentración final y en los efluentes descargados, y la frecuencia de aplicación y el efecto que tiene sobre los organismos presentes en el punto de descarga de residuos.
De esta forma, la SMA resolvió formular los cargos contra Celulosa Arauco y Constitución porque no se realizaron en forma oportuna, las medidas de cierre final de las etapas I y II de los sectores A, B y C del vertedero industrial de la planta.
Y además, porque no se realizó el monitoreo de efluentes conforme a lo que estaba autorizado, lo que quedó de manifiesto en que la toma de muestras de no se realizó en la cámara ubicada inmediatamente antes de la boca del emisario submarino en el Golfo de Arauco.
Junto esto, se aplican sustancias químicas del tipo (antiespumante) aguas abajo del punto de control. El informe señala que este punto se control estaba "resuelto por el programa de Autocontrol, afectando la representatividad de la condición final del residuo industrial líquido"
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Este complejo industrial ha generado una una alta contaminación tanto atmosférica como de desechos industriales al mar desde la década de 1970. Luego de varias décadas operando prácticamente sin ningún control ni regulación, la empresa indica que hoy busca modernizar sus instalaciones para disminuir la contaminación. Pero además, el proyecto M.A.P.A. está destinado a triplicar la producción de pulpa de celulosa en este complejo industrial, pasando de las actuales 790.000 toneladas anuales a 2.100.000, convirtiéndose en la mayor planta del país y una de las más grandes de América Latina. Este aumento de producción implicará un aumento en el consumo de agua, energía fósil e insumos químicos, además de una mayor presión sobre los territorios que soportan varias cientos de miles de hectáreas de monocultivos de pino y eucalipto en al menos cinco regiones de la zona centro sur del país.
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Mientras tanto, universidades y centros de investigación realizan estudios para determinar el grado de contaminación y perturbaciones en el ecosistema del Golfo de Arauco. Para esto, equipos de la Universidad de Concepción, la Universidad Católica y la Universidad de Chile, trabajan en torno la zona de descarga de residuos industriales en el Golfo, frente al complejo. Las instituciones académicas estarían midiendo parámetros en el agua, el fondo marino y las características de los organismos tanto en la zona de influencia directa del ducto, como en su zona adyacente.
Un buen momento económico y judicial para Celulosa Arauco.
Recientemente, comenzó un buen momento económico para la compañía extractivista, principalmente debido a alzas en el precio de la celulosa y al aumento de la demanda desde China, además del término de los procesos judiciales que habrían mantenido en incertidumbre a sus proyectos en Chile, como M.A.P.A. y el proyecto de pulpa textil en la Planta Valdivia, según señala una publicación de Lignum.
Junto a esto, recientemente Celulosa Arauco desistió de la compra de la productora de celulosa El Dorado en Mato Grosso do Sul (Brasil), después de no llegar a acuerdos con la junta de accionistas J&F Investimentos.
Otro proyecto que también se encontraba detenido hace dos años es la adecuación de la Planta Valdivia para producir pulpa textil, la que tendría como principal objetivo las exportaciones hacia China. Este proyecto de US$ 185 millones, se destrabó judicialmente el mes pasado cuando cinco comunidades mapuche que se oponían al proyecto habrían desistido de acciones en la Corte Suprema, con posterioridad a un acuerdo extrajudicial con la empresa de Angelini. Otras 10 comunidades también habrían sido incluidas en el arreglo, recibiendo en conjunto $700 millones, para financiar proyectos donde Celulosa Arauco actuaría también como asesora.
También estaría en evaluación la compra de activos a la empresa Masisa en Argentina, México y Brasil, el desarrollo de áreas de confección de muebles y juguetes, la producción de bebidas y alimentos en base al Maqui (Aristotelia chilensis)
La publicación también detalla que Celulosa Arauco se encuentra trabajando con la empresa australiana Csiro, para analizar series de tiempo con información sobre incendios forestales. Estas revisiones servirían para determinar necesidades logísticas de infraestructura vehículos y personal a la hora de enfrentar los siniestros.
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[caption id="attachment_35881" align="aligncenter" width="800"] Aserradero “El Cruce” de Forestal Arauco junto a las ruinas del poblado de Santa Olga en enero de 2017[/caption]
En 2016, la empresa realizó una reducción de personal en un 8%. Para este 2017, en la plana ejecutiva, los hijos del presidente de Empresas Copec, Roberto Angelini Rossi, tomarían puestos clave en la empresa maderera: Claudio Angelini Amadori asumió como subgerente de ventas de Paneles en EE.UU. y México; su hermano Mario Angelini es jefe del área comercial de Celulosa en Arauco; su primo Antonio Amadori Hamuy es el jefe de Comunicaciones Corporativas de Arauco.
Por otra parte, Camila Merino, ex ministra del Trabajo y ex gerenta general de Metro de Santiago, quien se desempeñaba como gerenta corporativa de Personas, Medio Ambiente, Seguridad y Salud Ocupacional, ahora será vicepresidenta del área Negocio Forestal. Anteriormente en ese cargo, se encontraba Álvaro Saavedra, quien ahora será presidente de Forestal Cholguán.
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El gerente de Asuntos Corporativos y Comerciales de Arauco, Charles Kimber señaló a la publicación especializada en el negocio maderero que aunque ahora los stocks de madera son suficientes, ya que están siendo cosechadas plantaciones que no fueron afectadas por los incendios, advierte que luego de 2019 va a existir un gran déficit de madera. El gerente hizo énfasis a que el déficit podría extenderse por 15 años en especial en la región del Maule, donde se vería afectada la operación de varios aserraderos en la zona. Esta situación habría gatillado la decisión de no reconstruir el aserradero el El Cruce de Santa Olga, dañado por el mega-incendio forestal "Las Máquinas" en enero de 2017.