Ana María Villaseñor: De la justicia a una gran injusticia.

 En toda nuestra querida patria, estamos terriblemente inundados, el país partido en dos. Si parece que " San Isidro” quisiera demostrar gráficamente en agua, como sigue este país dividido entre, los que tienen y los que no tienen y no tienen cómo defender lo que con mucho esfuerzo les ha costado en la vida, no podemos dejar de solidarizar con los que están literalmente mojados y los otros chilenos afectados en Chaitén...

Ana María Villaseñor: De la justicia a una gran injusticia.

 En toda nuestra querida patria, estamos terriblemente inundados, el país partido en dos. Si parece que " San Isidro” quisiera demostrar gráficamente en agua, como sigue este país dividido entre, los que tienen y los que no tienen y no tienen cómo defender lo que con mucho esfuerzo les ha costado en la vida, no podemos dejar de solidarizar con los que están literalmente mojados y los otros chilenos afectados en Chaitén.

Y que tenemos en nuestro "Otro San Pedro”, han pasado también una serie de injusticias, se dio una cuenta pública, en que parecía más bien un evento, de dar al "jefe" las gracias por saber cuadrar tan bien sus números. Que no es necesario, que nadie que no le caiga en "GRACIA MUNICIPAL", de ahí que en repartición de torta estaban los amigos, y los subalternos...dándose por cumplidos.....pero como este "Otro San Pedro" estuvo como el invitado de piedra....igual le manifestamos, la poca veracidad....yo no sé… tanta plata, y las calles siguen sucias, sacan los famosos contenedores, creando micro basurales....se instalan antenas, sin importarles ni por si acaso, la opinión del que va a tener, que morir viendo la antena.......¿justicia o injusticia?.

Pero el caso más emblemático ......del fin lucro, ha sido ver y tratar de  entender como la "justicia"   deja sin sus casas a 4 familias del sector de San Pedro Viejo, ese que tantas veces he dicho discriminado, postergado...que se acuerdan de él solo con fines comerciales.......pues bien, un cobro injusto los deja sin este bien material, que no tiene precio comparable con el de arraigo, de identidad, de haberse esforzado toda una vida, de haber pagado...hoy no se tenga más que "el cobro injusto, luego de lograr el alzamiento de sus propiedades, por el Ministerio de Vivienda, según consta en el decreto firmado nada menos por el presidente de todos los chilenos, señor Lagos, no tiene validez  alguna, para los señores del Banco del Desarrollo.....así se juegan con los  números, la deuda de la cooperativa Los Canelos, era más o menos un millón de pesos. Se remataron el día 14 de mayo, en Santiago en cuatro millones de pesos, cuatro de las treinta y cinco casas que tienen la deuda, y ahora el valor comercial de cada una asciende a cuarenta millones de pesos, ¿quién está atrás de todo esto?.

Hace tres años atrás, Don Emeterio Manríquez, al recibir la noticia de que su casa sería rematada, se suicidó...Acaso el dolor de la partida de este marido, padre y abuelo, no les revolvió la conciencia?, no bastó esta muerte para que la deuda haya sido pagada?, hoy su viuda llora, de que todo lo que construyó junto a su "viejo" igual fue rematado...Nuevamente han sido los vecinos el principal motor para dar a conocer esta gran injusticia, de la forma en que se hace hoy, la única forma posible de llamar la atención de todos "tomándose las calles" en una forma civilizada, porque aquí no se pusieron barricadas, no se destruyeron bienes públicos, sólo se paraba el tránsito y los vecinos generosos y solidarios nos acompañaban con sus bocinas, para colmo en las dos ocasiones han llegado los señores del orden.

Pero la última vez llegó un mayor de apellido Flores con una prepotencia digna de un dueño de fundo, ¿dónde quedó la caballerosidad de este hombre?, ni saludos, ni un preguntar del porqué, sabiendo todos que el primer trámite de un procedimiento es el saber el porqué, el cómo y quiénes son responsables. Pero a este señor no le importó el llanto de las mujeres, el dolor y la impotencia de un jefe de familia, sólo quería el despeje, ésa era su misión, y ¿dónde quedó el amigo carabinero?, en ningún minuto pensó que en ese instante representaba a una institución de servicio y entrega a los demás...Triste para todos los vecinos y subalternos ver que mientras la institución gana la admiración por su ayuda solidaria en estos momentos difíciles que vive el país arriesgando su propia vida, la entrega de cumplir, de ser del débil el protector...Pero el mayor Flores fue incapaz de dialogar amenazando con detención citando a la fiscalía y haciendo callar a todo aquel o aquella que osara refutar su posición para después retirarse de la misma manera, grosera al igual que su llegada, este subió a un patrulla y se fue...Linda la imagen de la institución y nada menos venida de un oficial.

               Ahora juzgue usted...si tenemos justicias o injusticias en nuestro San Pedro.