Javier Arroyo Olea / resumen.cl
Las implicancias del caso Luchsinger Mackay están lejos de terminar. Si bien en abril del año en curso fue enviado un informe a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos del cual se espera respuesta, José Tralcal y Luis Tralcal están ante la posibilidad de que le sean abonados años de condena a partir de las medidas cautelares que les fueron ejecutadas a partir el reconocido “Caso Turbus”.
En conversación con Resumen, Juan Carlos Tralcal Lleuful -hijo de José Tralcal Coche- aclaró que actualmente los comuneros permanecen en el Centro Penitenciario de Temuco, módulo 3-1 de presos comunes de buen comportamiento, cumpliendo la condena ratificada por la Corte Suprema por un total de 18 años de presidio en su grado máximo por el caso Luchsinger Mackay. En este módulo ambos realizan, entre otras cosas, trabajos de orfebrería para apoyar económicamente a sus familias mediante el antiguo oficio mapuche, mientras que el tercer condenado -José Peralino- cumple 5 años y 1 día de libertad vigilada.
Respecto a la situación actual, Juan Carlos comenta que “esperamos que este miércoles 20 de noviembre a las 12:00 hrs. en el Juzgado de Garantía de Temuco el Tribunal le otorgue, por ley y por derecho, los más de 3 años de tiempo que ellos pasaron con medidas cautelares en el caso anterior donde fueron absueltos tanto José Tralcal como Luis Tralcal.”
En aquella ocasión, José y Luis Tralcal fueron procesados desde julio del año 2009 hasta mediados del año 2013, cumpliendo casi más de 3 años con medidas cautelares las que -comenta Juan Carlos- “se debieran sumar a la condena del caso Luchsinger Mackay como un abono. Es decir, la cantidad de días que pasaron con prisión preventiva, arresto domiciliario nocturno, diurno, total, se considera como un tiempo que ellos ya cumplieron de cárcel por lo tanto se le descontaría finalmente a esta condena de 18 años del caso Luchsinger Mackay.”
Si bien no validan el sistema judicial del Estado chileno, espera que se les otorgue los años de abono para poder obtener una salida, lo más pronta posible, de la cárcel, mientras se espera atentamente la resolución de la Corte Interamericana de Derechos Humanos.
“Nosotros hacemos el llamado a que, como es un juicio público, las personas que puedan, que quieran acercarse al caso, a estar de alguna manera observando este caso puedan participar de esta audiencia, a que esta situación no pase desapercibida” comenta Juan Carlos. Asimismo, plantean la necesidad de estar atentas/os debido a que, de no entregarse el abono a los peñi, se realizará un llamado a agitar, manifestarse y generar presiones en el marco de los constantes abusos que pasan cualquier límite establecido.
Por otro lado, mantienen el llamado a que la población pueda colaborar “con las familias que mantienen a su gente en prisión política. El caso de José y Luis no es el único, están los hermanos Trangol, también está Facundo, está Jones Huala” y diferentes casos donde peñi necesitan el apoyo a las familias debido a que los juicios, además de ser agotadores física y psicológicamente, afectan y generan problemas económicos.
Fotografía: Retrato Independiente
