Cinco días de movilización y toma de accesos de Enap en Hualpén y en el terminal de San Vicente llevan los trabajadores subcontratados de la refinería, exigiendo la negociación de su actual acuerdo marco, el que permanece congelado y como indefinido desde 2017. Pese a los múltiples emplazamientos de la Seremi del Trabajo en el Biobío y de los sindicatos contratistas, la gerencia de la estatal optó por suspender sus operaciones logísticas y distribución de combustible en la región, en lugar de establecer una mesa de trabajo con ellos.

Por Juan Contreras Jara

Esta mañana, desde Enap Biobío, informaron mediante un comunicado público su decisión de suspender la distribución de combustible, debido a la toma de los accesos a la refinería en Hualpén y Talcahuano que hoy cumple cinco días. Lo anterior, explica Carlos Contreras, vocero de la Federación Nacional de Trabajadores Subcontratados (Fenatrasub), "para evitar sentarse en una mesa de trabajo que modifique nuestro acuerdo marco que se mantienen congelado. Ellos no tienen voluntad, están obstinados".

Este jueves y luego de tres días de tomas de accesos por parte de los trabajadores subcontratados, se concretó el primero de los acercamientos con Enap, pero terminó siendo infructuoso debido a que la refinería les está ofreciendo a los sindicatos contratistas iniciar una eventual mesa de trabajo recién en agosto y sin entregar ninguna seguridad formal de que ello ocurra.

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Frente a este aplazamiento en las conversaciones, tomado unilateralmente por la gerencia de la empresa estatal, desde la Fenatrasub comentaron que, "a ellos no les preocupan los trabajadores, les preocupa el paro de planta. Ellos quieren aplazarlo hasta agosto, pero nosotros no tenemos ninguna cobertura de que se vayan a sentar y vayamos realmente a trabajar y modificar el acuerdo marco".

Cabe recordar que durante los cinco días de tomas de acceso, los trabajadores subcontratados de Enap han permitido la entrada y funcionamiento de operadores en puestos de emergencia, laboratorios, entre otros, por lo que no se había paralizado la distribución de combustible, hasta este viernes, tras la decisión de la gerencia de la empresa.

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Sobre la urgencia de renegociar el acuerdo marco, Carlos Contreras explicó que "queremos destrabarlo, porque como cualquier negociación, no puede ser de carácter indefinido, es un proceso anti laboral y a eso nos ha sometido la mandante". 

Renegociar un acuerdo marco con la estatal, les permitiría a los subcontratados, "mejorar los anexos laborales, mejorar la calidad de la salud de los viejos y tener una cobertura de seguros para mejorar su protección. Hay muchos trabajadores que han partido de la refinería sin un seguro de protección en salud. Mejorar la calidad de los beneficios de escolaridad, de aguinaldos, vacaciones, etc. La brecha entre los trabajadores subcontratados y los de planta es muy grande y nosotros buscamos acortarla".

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