Desde los sindicatos contabilizan en más de 2000 las desvinculaciones desde que comenzó la pandemia hasta el día de hoy, focalizados en su mayoría en la región Metropolitana. La sobrecarga laboral se ha vuelto pan de cada día para las y los trabajadores, generando problemas de salud mental y físico, aseguran desde las organizaciones sindicales.“La gente ya está cansada de la explotación", comenta Tania Mansilla, presidenta de la Federación Nacional de Sindicatos de Supermercados y el Retail (Fenasib).

Por Branco Moreno Caro

En los últimos días, se ha vuelto de conocimiento público las condiciones de incertidumbre y precarización laboral dentro de las empresas del rubro del retail y supermercados. La semana pasada, quedaba al descubierto la situación de los trabajadores y trabajadoras de Walmart y Falabella, quienes acusaban despidos masivos y sobre carga laboral. Las cifras entre las 2 compañías bordean las 16 mil desvinculaciones en un periodo de tres años, estos vacíos en el personal, son cubiertos por los empleados que se quedan, bajo la figura del contrato multifuncional.

Según indican desde los sindicatos, en las tiendas Unimarc del país comenzaron los problemas en febrero de 2021 . Las federaciones estiman en alrededor de 2000 las personas despedidas, incurriendo, al igual que la multinacional Walmart, y la utilización de la cuestionada figura de la polifuncionalidad. Dependiendo de la compañía, varía el nombre del cargo, pero todos apuntan a lo mismo: los trabajadores deben realizar casi cualquier tarea que se les ordene, desde recibir cargamentos en las bodegas, hasta atender a la clientela, entre otros, todo en un mismo día.

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Esta modalidad de empleo fue declarada ilegal por la Dirección del Trabajo y distintas cortes de apelaciones del país; sin embargo, las empresas insisten en implementar dichos contratos a las y los nuevos trabajadores, apelando en todas las instancias y pagando multas de no más de 60 UTM.

Para obtener un panorama general de esta situación, RESUMEN tomó contacto con diferentes sindicatos y federaciones de trabajadoras y trabajadores de Unimarc, quienes relataron las duras consecuencias de estas prácticas laborales.

Zona norte

Manuel Jeria, presidente del sindicato Unimarc del Norte, que agrupa todas las tiendas en Arica, Iquique y Alto hospicio, explicó a RESUMEN que, “en nuestro sindicato tenemos un 99% de los trabajadores sindicalizados, por lo tanto, ante el contrato polifuncional, le dijimos a las bases derechamente que no firmaran, esto por la precarización laboral que significa, un 80% de los socios del sindicato se mantuvo firme y ante tal demostración de fuerza, la empresa no pudo hacer más que respetar nuestra posición”.

En todo caso, el dirigente denuncia que, aunque en el papel no se haya firmado la polifuncionalidad, existe una sobrecarga laboral constante, debido mayormente a la reducción de plana de las tiendas, por lo que las y los trabajadores cumplen más de una función de igual manera.

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Las cifras que entrega Jeria son categóricas, “antes, la planta en las 3 comunas era de 900 trabajadores, ahora vienen a ser 450. ¿Qué significa esto? Que hoy en día se ha visto mermada la salud mental de los trabajadores. Existe mucha presión, el desgaste psicológico y físico es grande, la gente llega agotada a trabajar. Si no fuera por los beneficios que mantienen los antiguos, probablemente también se irían”.

Esta situación, sin embargo, es peor para los recién llegados, comenta el dirigente, quienes están contratados bajo la figura del “operador de tienda” u “operador de producción”. No tienen beneficios laborales y deben realizar múltiples tareas por el sueldo mínimo, explica Jeria, y las federaciones no pueden hacer más que denunciar el hecho a las inspecciones del trabajo locales.

En cuanto a este grupo de trabajadoras y trabajadores, desde el sindicato Unimarc del Norte, expresan que, “a los trabajadores polifuncionales los obligan a sentarse en caja, ese trabajador como está con un contrato nuevo, no tiene bono venta, gana el mínimo, no tiene ninguna motivación, y no solo está en caja, seguramente estuvo en los pasillos reponiendo, recibiendo productos en la bodega o reponiendo mercadería. Muchas veces la gente que va al supermercado cree que los trabajadores somos pesados o andamos de mala, pero esto es por la sobrecarga laboral, la gente está exhausta”.

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Zona Sur

Tania Mansilla Obando, presidenta de la Federación Nacional de Sindicatos de Supermercados y el Retail (Fenasib), relató la situación de su organización. En este caso, a pesar de existir una fuerte unión sindical y haber logrado que casi ningún trabajador firme el cuestionado contrato, hubo cientos de despidos de igual forma. Esto ha llevado a una “reestructuración de cargos”, traducida en sobrecarga y presión laboral.

La presidenta de Fenasib resume como la empresa intentó aplicar la polifuncionalidad, aseverando que, “Unimarc, en vista de lo que estaba sucediendo con Líder, comienza a replicary también llegaron con el contrato polifuncional. La estrategia que utilizaron fue darle un relato romántico, de que los trabajadores podrán aprender más del rubro y que se les abre una oportunidad, agrega la dirigenta. "Nosotros, como federación, conversamos entre todas las tiendas y les dijimos a los representantes de la empresa que nuestros trabajadores no firmarían ningún contrato hasta que los sindicatos no los revisaran. Así tratamos de dilatar la situación, diciéndole a los trabajadores la verdad, que este nuevo contrato se traducía en sobrecarga laboral”.

Los resultados de esta práctica sindical fueron categóricos. De los casi 500 trabajadores y trabajadoras que agrupa la federación en tiendas entre Panguipulli y Frutillar, solo tres firmaron el contrato. Ante esta situación, los sindicatos denunciaron y apelaron, siendo revertida la medida para dos de los tres empleados, quedando con sus contratos y beneficios antiguos.

Sin embargo, denuncian desde las dirigencias, a pesar de todos los despidos, no se ha vuelto a contratar a la gente para que llenen esos vacíos. Entonces, aunque no estén contratados como trabajadores multifuncionales, los empleados de Unimarc están sobrellevando una carga laboral inmensa, traducida en dolencias físicas y por sobre todo, estrés laboral, según aclaró la dirigenta. “La gente ya está cansada de la explotación".

Zona Centro

La región metropolitana es un caso aparte. Cristopher Fuentes, secretario del Sindicato Nacional de Trabajadores de Empresa Unimarc, que agrupa la mayoría de tiendas de dicha región, relata que, “la homologación de cargo partió en la región a mediados de 2020. En plena pandemia aprovecharon la confusión de la gente, entre tanto papeleo, les hicieron pasar los contratos a los trabajadores, ellos no sabían en ese momento lo que firmaban”.

En ese contexto, la Federación llamó a los socios y socias a no firmar los contratos, al igual que en las otras regiones del país, pero en este caso, la empresa comenzó a ofrecer dinero. Fuentes explica que, “ellos ofrecían un incremento de sueldo, 12% o de un 20%, entonces ahí es cuando nosotros comenzamos a perder fuerzas. Finalmente, el 80% de nuestros socios firmó la homologación de cargos, pasando a ser trabajadores polifuncionales”.

Las consecuencias no se hicieron esperar, acota el dirigente. Además de la homologación, vino una reestructuración de planta, aumentando sustantivamente las funciones de los y las trabajadoras . “A nosotros, en un ciclo de dos años, nos despidieron alrededor de 1000 trabajadores solo en la región metropolitana, entonces comenzamos a vivir situaciones insólitas, por ejemplo, cajeras atendiendo solas una tienda, filas de más de 50 clientes”.

La restructuración de las tiendas no vino de la mano de mayor productividad, por el contrario, el dirigente denuncia que la logística se descuidó y que esta política de la empresa apunta solo al ahorro en cuanto a remuneraciones.

Las empresas del retail en el país continúan funcionando al margen de la ley, instalando un modelo de tiendas que privilegia las compras online y el autoservicio, con trabajadores y trabajadoras multifuncionales, que ganan lo mismo, pero efectúan más de una tareas. 

Según se ha podido recabar en las últimas semanas, el número aproximado de despedidos por estas tres compañías; Walmart, Falabella y Unimarc, estaría cercano a los 20 mil trabajadores y trabajadoras. Lo anterior ha implicado más presión y sobrecarga laboral, según han comentado a RESUMEN los sindicatos de las tres empresas, apuntando a afectaciones en su salud mental, ligados al estrés y ansiedad.

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