[resumen.cl] Los estudiantes secundarios del Liceo C90 de Tirúa se tomaron el establecimiento denunciando problemas de infraestructura y movilización; y exigiendo el fin a la educación “colonizadora” además de reformas al plan de sexualidad.
Xavier Rosales, presidente CEE Liceo C90 de Tirúa comenta que “la semana pasada hicimos un paro de advertencia y entregamos un petitorio extenso” y tenía que volver en una semana firmado por el alcalde, de forma escrita. Sin embargo, no hubo respuestas satisfactorias y por eso decidieron iniciar una toma indefinida.
Para los secundarios, la propuesta de la municipalidad “es pobre”
La movilización se da producto de los resultados de la asamblea donde analizaron las problemáticas del establecimiento y vieron que había graves falencias en el recinto. Entre ellas implementos básicos, por los que hicieron una toma de advertencia la semana pasado. “No tenemos papeles, ni tinta, ni impresora. A ese nivel de precariedad llegamos.” afirma Javier.
De este trabajo surgieron además otras problemáticas, como la critica a que el plan de sexualidad del establecimiento está totalmente obsoleto “las chiquillas se organizaron y ellas se hicieron cargo de esa temática. Plantearon la reforma del plan de sexualidad y que se explique que no es solo tener relaciones sexuales, sino que tiene que ver también con la relación de pareja, con sentirse bien , el no agredirse, etc.”
Otra demanda tiene que ver con la conflictiva “interculturalidad” en la zona. El estudiante explica que el colegio tiene el sello de interculturalidad. Sin embargo “de interculturalidad es poco el espacio que hay” afirma. Y fustiga “la profesora encargada hace lo que puede con lo que tiene” En ese contexto es donde sale la idea del proyecto del fin a la educación colonizadora “que busca que dentro del territorio y ojalá en todas las comunas que tengan alcaldes mapuche, hagan una reforma a nivel curricular de historia donde se enseñe en particular la historia mapuche, al igual que la historia que sale en los libros de todo Chile. Queremos que al menos se nos haga una hora de historia mapuche” explica Rosales.