Este martes 28 de Junio, los trabajadores de Ferrol (ex Gacel) interpusieron una demanda por fraude laboral contra su empleador, acompañándose de una marcha por las calles del centro de Concepción.
Luis Morales, presidente del Sindicato 1 de Ferrol, ex Gacel, comenta a Resumen que el empleador no cumple con los acuerdos contractuales, pues no se pagan sus sueldos mensuales, y hace 18 meses que no les cancelan las cotizaciones a las AFP. Denuncia además, que se comete un verdadero fraude pues se está llevando a la empresa a la quiebra, lo que significa que no se pagara la totalidad de la indemnización por años de servicio de los trabajadores. Las irregularidades en los pagos de sus sueldos, se arrastran desde agosto del 2010.
Los problemas, nos señala Luis, se remontan al año 2004, cuando la empresa de calzados Gacel incurrió en una cantidad de gastos que no le fue posible sostener, siendo adquirida por una junta de accionistas denominada Capital Trust. Una vez que se hicieron de la empresa, conformaron la empresa Calzados del Sur, que poco a poco va dejando abandonada la fábrica, pues su interés era mantener solo la marca que le daba el prestigio, que era Gacel, que tiene 31 tiendas en todo el país.
Guante adquirió la marca Gacel, y la fábrica que producía los calzados Gacel (Calzados del Sur) se transformó en Ferrol.
Paulatinamente la empresa se fue presentando como poco viable, en decadencia, para posteriormente pedir la quiebra y así evitar el pago de indemnización por años de servicios, que corresponde a alrededor de 2 mil millones de pesos. Eso lo habría manifestado, según relata el presidente del Sindicato, el mismo abogado de Guante, actuales propietarios de la marca Gacel.
Lo que sucede en Ferrol, es la manifestación de como funciona hoy el modelo económico. La fábrica se abandona pues comparada con la producción y precios ofrecidos por las fábricas asiáticas, debido también a que las importaciones no llevan impuestos por los Tratados de Libre Comercio con Asia- por lo tanto sin protección a la industria nacional-, es casi irrisoria. La Cámara de Producción y Comercio señaló hace poco, que de 100 zapatos importados, 85 son Chinos.
Por otra parte se evitan la tediosa situación para los empresarios, de tener que lidiar con justas demandas de los sindicatos chilenos, como la actual. Hoy, la fábrica del mundo funciona en China, que elabora los productos de todas las empresas, que tras la fabricación, imprimen sus marcas en los calzados. Gacel sigue vendiendo en todas sus tiendas, pero su antigua fábrica es llevada a la quiebra, intencionalmente, según los trabajadores.
La fábrica se cerraría en noviembre, según les han señalado. El terreno donde está la fábrica ya ha sido vendido.
Si se declara la quiebra de la fábrica, las indemnizaciones se pagan con un tope de 11 años, por lo tanto, si hay trabajadores que llevan más años de servicio, como la gran mayoría de los trabajadores, esos años los pierden. SI ganan 500 mil pesos, lo máximo que podrán obtener son 5 millones y medio; hay casos de personas que tienen 30 e incluso más años de servicio, con escasas probabilidades de encontrar otro empleo tras esta quiebra.
Los trabajadores llamaron al gobierno a parar este abuso patronal que viven 307 trabajadores. Convidaron además, a la opinión pública a no dejarse engañar por la marca Gacel, pues el calzado que se compra es de otra calidad y es no es de fabricación chilena.