La caleta Tubul en el golfo de Arauco, fue arrasada por el maremoto que siguió al terremoto del 27 de febrero, sus habitantes perdieron todo; sus áreas de manejo, donde cultibaban mariscos, sus botes y sus casas. La propia localidad quedó aislada al caer los puentes que la unen con Arauco y Llico.
Hoy a 9 meses del terremoto 200 familias viven en casas inhabitables y con graves problemas sanitarios, mientras esperan subsidio del Serviu.
Iván García, presidente de la Junta de Vecinos de San José de Tubul, denunció a radio Bio Bio “la demora en los trámites y la falta de información por parte de las autoridades de Vivienda para la obtención de subsidios”. Agregando que “para que se construyan sus casas, deben desalojar el lugar antes y no todas las familias tienen acceso a hogares provisorios mientras se construyen las viviendas”.
Problema similar estan viviendo habitantes de diversos pueblos y barrios de nuestra región, al ineficiente accionar de las autoridades hoy se une su profunda indolencia frente al drama de los danmificados.