Hoy se cumple un mes desde que los trabajadores del puerto Angamos (Mejillones) paralizaron sus actividades, demandando un trato igualitario para los operarios fijos y los eventuales. Aunque la empresa Ultraport asegura que el 90% de los empleados retomó sus labores, el Sindicato Nº2 asegura que sólo un 50% está trabajando.
Desde este día está permitido que los trabajadores del sindicato que están involucrados en la huelga pueden reintegrarse a laborar. Si es que el 50% más uno de los trabajadores entra a a trabajar, la huelga se define como acabada.
De 163 trabajadores del sindicato, 60 regresaron a trabajar. El gremio aseguró que las amenazas de despidos fueron la principal razón de los retiros. Asimismo, corroboraron que Ultraport contrató personal desde Valparaíso para la carga y descarga de containers.
Esta movilización nacional ha dejado al descubierto la deficiencia de nuestra actual legislación laboral. A pesar de que las prácticas antisindicales llevadas a cabo durante esta movilización no son un hecho aislado o una excepción, no deja de preocupar que de 100 trabajadores sólo 14 están afiliados a algún tipo de sindicato y sólo 12 de cada 100 han podido negociar colectivamente sus condiciones de trabajo.
Desde el punto de vista de la Fundación Sol, la actual legislación favorece principalmente a los empresarios ya que apunta a consolidar un modelo de relaciones laborales librado al mercado, donde a los trabajadores no puedan desarrollar su fuerza. Ejemplos claros sobre esto son la posibilidad de reemplazar trabajadores, la excesiva procedimentalización de los derechos colectivos y la imposibilidad practica de negociar más allá de la individualidad jurídica de la empresa, entre otras, explica Valentina Doniez, parte de la fundación.
“Nuestra legislación va en contrasentido del derecho laboral que busca contrarrestar el excesivo poder del empleador dotando a los trabajadores de derechos colectivos fuertes, eso es lo que impulsan organismos internacionales como la OIT, que cuenta con bastante legitimidad en la materia” explica Doniez.
La mesa de diálogo
Esta mañana se inició la mesa tripartita en el Ministerio del Trabajo. Representantes del gobierno, trabajadores y empresarios portuarios buscan destrabar la paralización. Para el dirigente Sergio Vargas, hoy buscan solucionar el problema de Mejillones y el retroactivo de la media hora de colación, las principales demandas que se han levantado hace más de tres semanas.
La instancia cuenta con la presencia del ministro del Trabajo, Juan Carlos Jobet, acompañado del ministro de Agricultura, Luis Mayol, el ministro de Transportes y Telecomunicaciones, Pedro Pablo Errázuriz y el subsecretario del Interior, Rodrigo Ubilla. Representando a los trabajadores se encuentran Pedro Riquelme, vocero de la Unión Portuaria del Biobío, y Sergio Vargas, presidente de la Union Portuaria de Chile, mientras que de parte de los empresarios arribó Alberto Borquez, gerente general de la empresa San Antonio Terminal Internacional. Sin embargo, según lo informado la empresa Ultraport, de la familia Von Appen, no se presentó.