Vecinos sin casa se toman terreno en Coronel por no tener solución habitacional
En Coronel
Una casa de material ligero y un color ladrillo fue la primera en instalarse en el sector. Giovanni Rivera, vocero de los vecinos, comenta que se trata del hogar de una joven cuya madre fue erradicada a una vivienda social y se la regaló y que por eso se ve de mejor calidad que el resto. Junto a ella proliferan las mediaguas construidas por los propios pobladores, muchas bastante precarias, las que probablemente no resistan el invierno.
En una mediagua, más grande que las demás, se escucha el ruido de máquinas cortando madera. Se trata de la estructura de una futura Iglesia evangélica, donde nos recibe Giovanni “En invierno llegarán acá, a la Iglesia” comenta.
Mientras nos explica la realidad de los pobladores, nos habla de su fe cristiana y de como la iglesia evangélica y sus pastores se han olvidado de la verdadera palabra: el actuar. No es el único que ha criticado los pomposos discursos de algún tipo de autoridad. Como decía Martí “Hacer es la mejor forma de decir”.
“Nos tomamos este lugar, sin pedirle permiso a nadie, obviamente, porque las tomas son ilegales en Chile. Lo cercamos [...]” afirma Rivera. Los pobladores llegaron al lugar el 14 de febrero con algunos vecinos por una situación desesperada.
“Donde yo vivo, en el cerro Obligado, de la gente que erradicó ENEL quedaron 22 familias, que están en proceso de preaprobación de un proyecto para vivienda de ENEL. Todavía no tienen solución, pero también quedan 18 familias sin nada, porque es gente que llegó después del 2013 a vivir”. Para ser beneficiados con la erradicación, debido al funcionamiento de las termoeléctrica de ENEL en Coronel, los vecinos debían estar viviendo entre 2010 y 2013, sin embargo estas 18 familias llegaron después. “Ellos no tienen ninguna posibilidad con ENEl, entonces no los podía dejar botados. Así que como presidente de la Junta de Vecinos, junto a otros vecinos, decidimos venir a tomarnos el terreno”. La movilización no ha estado exenta de dificultades, los vecinos necesitan urgentemente baños químicos y agua potable, servicios básicos para vivir.
No obstante que la iniciativa surgió de Cerro Obligado, todos no son de allí. El vocero explica que una vez que se instalaron en el lugar, vecinos sin casa de El Sauco, de la Población Berta, de Nuevo Amanecer, del Cerro La Colonia, de los Jardines, de Lagunillas y de otros lugares de la populosa comuna comenzaron a llegar, debido a la necesidad básica de contar con un techo. “Tenemos gente minusválida, gente de la tercera edad, gente con cáncer, mamás con 4 niños que las hemos tratado de ayudar en lo que más podamos. Hemos construido mediaguas por nuestros propios medios y hemos regalado mediaguas también, con dineros que se han juntado entre nosotros mismos.”
Son 72 familias que albergan sus esperanzas en este lugar, unos 70 niños. Alrededor de 200 personas en total. “La gente se aburre“-señala Giovani- “Hay gente que lleva 10 años esperando un proyecto de vivienda y no ha tenido solución. Entonces la gente está cansada de esperar tanto. Hoy en día sin pituto no se puede hacer nada. Se tomó esta medida para presionar un poco y para darles tranquilidad porque la gente no puede arrendar. Los arriendos están super caros, se elevaron un montón”
El vecino cuenta, para graficar la dura realidad que campea en el lugar, de un enfermo de cáncer que vive con su hijo y que con el dinero que logra ahorrar del arriendo, está comprando sus medicamentos.
Voces en contra y a favor también hay. De hecho, los vecinos comentan que gracias a la solidaridad de sus pares de Coronel han podido contar con enseres que les permiten sobrevivir en las precarias condiciones de la toma. Pero también hay gente está en contra y los trata de aprovechadores. A esas personas Rivera les señala “si ellos vinieran y vieran la realidad que hay aquí, sabrían que la realidad es otra”
Cabo Froward, la empresa portuaria propietaria del terreno ya estampó una denuncia por la toma de los sin techo. Los vecinos esperan que de la mediación entre la Municipalidad de Coronel y la empresa surjan acuerdos que les permitan al fin, obtener un lugar propio donde vivir.