Otro San Pedro mas allá del Puente Viejo: Villa el Recodo

 A través de este medio de comunicación describiré como es este sector denominado  El Recodo, y diré que se encuentra ubicado en dirección Poniente, después del Puente Viejo, y en ahí para adelante en suma llega hasta el KM 17 que corresponde al sector del Patagual. Todo este sector también es conocido como “Camino a Santa Juana”, que lo lidera una calle principal que bordea el Río Bío-Bío y que es ocupada mayoritariamente por camiones que cargan madera. En los primeros kilómetros hay una serie de comercio nocturno de restoranes y discotecas, unas cuantas villas, villorrios y cada vez más casas a orilla de camino. Las más reconocidas son precisamente una que lleva el nombre “El recodo”  y otro sector denominado “Pedro de Valdivia Sur”. Más al Sur no hay viviendas de conjunto, sino una serie de viviendas aisladas. Estos dos sectores nombrados son más conocidos, porque ambas poblaciones se internan hacia el cerro y constituyen el recorrido de la UNICA Línea de Locomoción Colectiva “Rengo Lientur” que de Lunes a Viernes transitan  con un intervalo de 15 a 20 minutos;

y de las 7,10 de la mañana hasta las 10 de la noche; los sábados y domingos circulan cada 30 minutos o más, y con la inseguridad que el último recorrido no alcance a completarse. Es decir las personas no pueden salir de todo este sector por emergencias, tampoco pueden comprometerse a entrar a un trabajo antes de las 8 de la mañana;  salvo que tenga vehículo particular; o en su defecto los lleven “a dedo”, o salgan al camino para ver si el recorrido de Santa Juana, hace el favor de subirnos a su recorrido. Para que pensar en una emergencia de salud, que más adelante detallaré. Por otro lado, por este camino transitan vehículos a toda velocidad que son un peligro para los habitantes desmotorizados; sino hay que acordarse que a fines del año pasado sufrimos un accidente impactante, donde una mujer de edad avanzada fue atropellada y decapitada, por atravesar la calle y dejar la basura en la berma contraria a su vivienda, porque sino corría el riesgo de que su basura no fuera recogida. Para abundar en el tema, hace unos años atrás uno de los paraderos de microbuses, fue violentamente arrancado por un camión de carga.

No es muy difícil concluir entonces, que para las autoridades de San Pedro, no existimos, como que nos batimos por nuestros propios medios. Y por ello quisiera decir que existe un pensamiento generalizado, que para este lado, sólo habitan personas con muchos medios económicos, pero esto es un mito, ya que en los dos sectores nombrados anteriormente viven personas con escasos recursos y que para el vivir diario dependen de los servicios que las instituciones deben otorgar a los habitantes de una comuna. Pasemos ahora a hablar de un Consultorio de Salud de Emergencia, antes se llega al Hospital Regional que al consultorio más cercano; y en este caso deben sumarse los dos sectores nombrados más San Pedro Viejo y alrededores; porque llegar al Consultorio ubicado en la Población Candelaria nos implica tomar dos locomociones de ida y dos de vuelta para que nos digan “Que no hay Hora” o “Venga mañana” o “Llame por teléfono”. Quizás en los datos del consultorio no aparezcan pacientes de este sector, pero no porque no existan o no necesiten atención, sino porque me he enterado que hay muchas personas que se atienden en uno de los Consultorios de la Comuna de Concepción. DESDE ESTA TRIBUNA PROPONGO QUE SE CONSTRUYA UN CONSULTORIO PARA ESTA ZONA, y aseguro que tendría pacientes, porque podrían atenderse los habitantes de las siguientes áreas de viviendas: La Villa San Pedro, las nuevas construcciones de la calle Michimalonco, el Sector de la Laguna Chica, San Pedro Viejo, el Sector más cerca del Puente Viejo, El Recodo y Pedro de Valdivia Sur, y de todo los habitantes que hay entremedio y que pasan desapercibidos porque viven en casa humildes que grandes frondosidades de hojas se encargan de disimular en el camino.

A todo esto, yo soy arrendataria en esta zona y me gusta vivir aquí, pero veo que estos dos problemas que he nombrado son cuestiones vitales para seguir residiendo en este lugar, y no entiendo como otras personas que han vivido toda su vida o llevan largos años viviendo en estas condiciones no manifiestan su disconformidad ante estos hechos. Creo que inventaré un concurso  para aprenderme la historia de aquí y saber como los primeros habitantes solucionaron los problemas de abastecimiento, locomoción, salud, agua, colegios. Invito a quien quiera ayudarme. Bueno, hasta el próximo número.

 Ruth Ramírez